FÚTBOL
Francia e Italia, favoritas
Por La Semana.es2 min
Deportes06-06-2004
Como en toda gran competición, las selecciones se dividen entre las que se juegan la vida en la primera fase –del 12 al 23 de junio– y las que aspiran a jugársela a partir de cuartos de final: entre ellas puede estar la República Checa, si aprovecha la debilidad aparente de alemanes y holandeses.
Grupo B Corregidos los errores del Mundial de Corea y Japón, el bloque de Francia aspira a defender el título con un puñado de jugadores comprometidos, ambiciosos y letales como pocos en el área contraria. Son los claros favoritos, por más que Inglaterra tire de sus figuras, David Beckham y Michael Owen –con permiso de Wayne Rooney, que aspira a revelación–, como carta de presentación. Sólo un golpe de fortuna haría variar a Sven Goran Eriksson su objetivo, la segunda plaza, aunque a ella opta una Croacia que, a pesar de contar con jugadores poco conocidos para el gran público, tiene trampa. La aspiración de Suiza, en cambio, será en principio la de no saldar con derrotas sus partidos. Grupo C Italia, siempre aspirante a todo y con una tripleta atacante de lujo –si Giovanni Trappatoni hace jugar juntos el talento de Francesco Totti, la creatividad de Alessandro del Piero y la efectividad de Christian Vieri–, debe aspirar a ser primera de grupo, con permiso de Suecia y Dinamarca, dos rivales que hacen del sacrificio su mejor virtud, pero que no desdeñan a jugadores con proyección ofensiva como Fredrik Ljundberg y Henrik Larsson, o como los potentes Ebbe Sand y Jon Dahl Tomasson. Bulgaria, a la sombra de una generación casi irrepetible de jugadores como Luboslav Penev y Hristo Stoitchkov… terceros en el Mundial de 1994, aspira a dar la sorpresa en la medida en que vayan sumando puntos. Grupo D El llamado grupo de la muerte, por el potencial de sus componentes, puede no serlo tanto por los síntomas de vulnerabilidad que han mostrado Alemania y Holanda en sus últimos compromisos de preparación. De no remediarlo a tiempo Rudi Völler –con un equipo que aglutina jugadores veteranos y jóvenes– y Dick Advocaat –con una generación que está ante una de sus últimas oportunidades de conseguir un gran título–, ambos pueden verse relegados a luchar por la segunda plaza del grupo, pues los checos –que ya fueron finalistas en 1996– tienen un bloque compensado, con Pavel Nedved como figura, y difícil de doblegar. Letonia, novata en un gran torneo de selecciones, fía sus opciones al olfato goleador de Maris Verpakovskis para no asumir el papel de cenicienta.