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GALARDONES LITERARIOS

Los finalistas de ¬La Sonrisa Vertical¬ no dan la talla

Por Isidro García-Recio LópezTiempo de lectura1 min
Cultura27-01-2004

Luis García Berlanga, Almudena Grandes, Juan Marsé, Eduardo Mendicutti y, en representación de Tusquets Editores, Beatriz de Moura no lo vieron claro... Dicha editorial, que desde hace 26 años entrega este premio a los grandes de la literatura erótica universal, se está planteando -incluso- la continuidad del galardón.

Las 152 obras originales presentadas a concurso cayeron en saco roto... Si bien la gran mayoría estaban escritas en castellano, 46 de ellas provenían de Hispanoamérica, EEUU, Canadá y Europa. Una nota oficial indica que el jurado tomó la decisión de declarar “desierta” la XXVI edición del Premio porque, entre los manuscritos seleccionados para la deliberación final, "algunos contenían ideas y planteamientos sugerentes que sintonizaban con el género erótico", pero adolecían de la más mínima ambición literaria; y otros, en cambio, "presentando un tratamiento literario satisfactorio, no alcanzaban la tensión erótica imprescindible para aspirar a este galardón". La misma nota señala, además, que Tusquets Editores se tomará un tiempo de reflexión con el objetivo de llegar a una respuesta sobre la continuidad del concurso, puesta en entredicho hasta nueva orden. A finales de abril del presente año, la editorial hará pública su decisión, de la cual pueden desprenderse -en caso de que exista una XXVII edición- múltiples cambios en las bases del proceso de admisión. En cualquiera de los casos, no es esta la primera vez que La Sonrisa Vertical se queda sin dueño, pues ya en 1983 y 1994 se dio la misma situación. Pero, a pesar de tan desahuciado currículo, el Premio creado en 1977 por el cineasta Luis García Berlanga, ha revelado al público la existencia de escritores de la talla de Almudena Grandes y Eduardo Mendicutti, ajenos -hoy día- al género de su génesis literaria.