ELECCIONES GENERALES
El partido de Rosa Díez se tambalea a tres meses de los comicios
Por Raquel Rodrigo
2 min
España19-12-2007
A menos de tres meses de las elecciones parece cada vez más cierto que, como la misma Rosa Díez dice, esta está siendo una “legislatura maldita”. Tras los problemas para obtener créditos, ahora se enfrenta a una crisis interna en la facción de UPD de Cataluña por la dimisión en pleno del comité electoral de Barcelona.
La dirección del partido ha aceptado la dimisión y ha negado que se deba a la existencia de “luchas internas” por la composición de las listas electorales. “Ni existe tal lucha ni el partido ha decidido quiénes formarán parte de sus listas en Cataluña”, han afirmado los dirigentes, lamentando al mismo tiempo que algunos de sus afiliados sean “incapaces de entender” cómo se crea un partido “transversal, laico y progresista basado en la confianza y enfrentado a graves dificultades para hacerse oír”. El enfrentamiento interno lo han protagonizado el presidente del comité electoral, el liberal Luis Bouza-Brey, escindido de Ciutadans hace unos meses, y el presidente de la coordinadora catalana Ángel Hernández. Ambos querían el control del proceso de expansión del partido y la elección del cabeza de lista por Barcelona en las elecciones generales de marzo. Los ocho componentes del comité electoral provincial de Barcelona han presentado su dimisión, como consecuencia de su “total desacuerdo con la línea marcada por la coordinadora catalana” del partido. Otro de los motivos de la dimisión es la intención del comité electoral de crear un comité local exclusivo para la ciudad de Barcelona, que dependería del provincial, pero la coordinadora catalana se oponía a ello. UPD ha difundido un comunicado en el que asegura que el partido no ha decidido aún quiénes formarán sus listas en Cataluña, y dejó claro que no presentará como candidatos a personas “implicadas en maniobras destructivas”. Por su parte, Bouza-Brey niega la versión que UPD ha dado y afirma que él no quería ir en las listas electorales al Cogreso. Además ha precisado que la causa de la dimisión fue que sentían que la coordinadora de UPD “bloqueaba y desautorizaba” su trabajo. “El Comité de Barcelona se sintió bloqueado y desautorizado porque mientras la Coordinadora de Cataluña estaba creando agrupaciones locales estaba hablando con esas agrupaciones de nombre para las candidaturas”. Por último, ha afirmado que no abandonará el partido y que se quedará militando como un afiliado de base.