COLOMBIA

Álvaro Uribe, reelegido presidente por una mayoría abrumadora

Por Marta Aguilera2 min

Internacional04-06-2006

Las elecciones presidenciales del pasado domingo 28, han sido históricas en Colombia, ya que no solo demuestran la revalidación del mandato uribista, sino que además dejan claro el ascenso político de la izquierda representada en el PDA (Polo Democrático alternativo).

La victoria del derechista Álvaro Uribe tiene cierto impacto sobre el mapa político latinoamericano. Mientras la región da un giro a la izquierda, Colombia se ha mantenido al margen de la tendencia y ha revalidado a Uribe en el poder. El presidente colombiano constituye uno de los pocos aliados que le quedan al presidente estadounidense, George W. Bush en la América Latina. El Polo Democrático Alternativo (PDA), encabezado por Carlos Gaviria, se convirtió en la segunda fuerza electoral que logró la mayor cantidad de votos de esta formación en la historia del país. Mientras tanto, el histórico Partido Liberal sufrió una escandalosa derrota con Horacio Serpa como candidato, quien obtuvo la tercera derrota consecutiva. El ex presidente César Gaviria, director de este partido, hizo un llamamiento para que su grupo político ejerza una oposición seria y constructiva al recién estrenado mandato de Uribe. Las cita electoral dejó también varios hechos a tener en cuenta tales cómo la abstención, que subió de 53,5 por ciento en 2002 a 54,9 por ciento y el bajísimo apoyo al ex alcalde de Bogotá, Antanas Mockus, quien apenas consiguió 146.000 votos en todo el país y firma con ello su desaparición de la escena política nacional. El punto más importante del programa político de Uribe son las negociaciones de paz con la principal guerrilla de su país: las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), con el que ya ha llegado a varios acuerdos. A pe sar de que las FARC habían anunciado que no boicotearían las elecciones, el día de los comicios se registraron varios ataques y enfrentamientos con la Policía y el Ejército. Las refriegas dejaron tres militares y cinco guerrilleros muertos, y cinco agentes heridos. Pero fue el secuestro de 16 jueces electorales en el oeste del país, cerca de la frontera con Panamá, la acción de la guerrilla que más golpeó al sistema. Aún así, y tal vez influenciado por las más de cinco décadas de violencia producto de un conflicto político interno, los analistas colombianos tendieron a caracterizar la votación como “tranquila”. El mundo entero le observa La reelección de Uribe generó diversas reacciones en el hemisferio. El gobierno de Estados Unidos expresó su beneplácito por el triunfo del candidato, pues es un declarado aliado de Washington en la lucha contra el terrorismo y una esperanza de contención a los gobiernos de izquierda que se han incrementado en Sudamérica. Por su parte, el Gobierno ecuatoriano de Alfredo Palacio felicitó a Uribe, pero solicitándole que para el siguiente período intensifique el diálogo con Quito y mejore las tensas relaciones que durante los últimos meses se han palpado por incidentes militares en zonas de frontera.