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SANIDAD

La droga legalizada

Por Beatriz MartínezTiempo de lectura1 min
Sociedad16-12-2005

Desde el primer día de 2006 los hábitos de muchos fumadores españoles tendrán que cambiar para adaptarse a las medidas de la nueva ley antitabaco. Algunos colectivos consideran que es una persecución exagerada contra el fumador con el fin de evitar que sida fumando en espacios donde perjudica a los no fumadores.

Sin embargo, el debate reside en algo más simple, si el tabaco es tan nocivo para la salud, debería ser más conveniente, para extinguir su consumo, que no se venda en máquinas y estancos. Pero, a través de los impuestos sobre el tabaco, el Estado recibe en sus arcas grandes sumas de dinero con los que se financian diversos servicios públicos. A muchos ciudadanos le resulta contradictoria la campaña que que ha puesto en marcha, ahora que los ciudadanos saben que el tabaco produce graves enfermedades, cáncer, infarto, y que es especialmente dañino para la mujer que utilice anticonceptivos por riesgos de sufrir enfermedades cardiovasculares, trombosis, problemas de fecundidad y osteoporosis en la menopausia, entre otras dolencias. Asimismo, hay quienes denuncian que el tabaco sea una droga legal, una vez probados sus efectos adictivos. En esta línea, algunos colectivos antitabaco, piden a la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) que intervenga no sólo aportando nuevas campañas, la última se titula Cada vez cuenta. Piensa, centradas en especial en el consumo de sustancias como cannabis, heroína y cocaína, cuyo consumo está aumentando notablemente. Existe un conjunto de medidas encaminadas a evitar, reducir y/o retrasar el abuso de estas sustancias o en caso de haberse producido, reducir al mínimo las consecuencias negativas de tal abuso. Educar a los individuos para que mantengan relaciones responsables con las drogas, para que aprendan a enfrentarse a la vida y sus diferentes situaciones sin necesidad de recurrir a ellas, es uno de los principales objetivos de la prevención. Para ello la formación en valores, hábitos, actitudes y habilidades personales y sociales es de vital importancia y la educación es el medio idóneo para ello. Se trata, en definitiva, de la Educación para la Salud.