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Aznar e Ibarretxe: paz y autodeterminación

Por La SemanaTiempo de lectura2 min
España29-07-2001

Se reúnen los dos dirigentes después de que el lehendakari, Juan José Ibnarretxe, lo hiciera con el Rey. Será con Aznar con quien se planteen dos asuntos insoslayables para los nacionalistas: soberanía y autodeterminación. Pero el presidente del Gobierno tiene clara una cosa: que es de ideas fijas y que la lucha contra ETA debe abordarse sin ambigüedades para garantizar los derechos de todos los vascos y de todos los españoles.

Se ha comentado mucho la seriedad con que el rey recibió a Juan José Ibarretxe. Un monarca como el español, siempre dicharachero, no tomó la iniciativa de ninguno de los comentarios que los dos hombres de Estado se hicieron durante la breve sesión de fotos antes del discrecional encuentro, que duró más de lo que se podía suponer. Prometió el mandatario vasco que trabajaría para lograr la paz, el objetivo que para José María Aznar debería ser prioritario en la nueva legislatura vasca. Aznar aborda el encuentro con disposición al diálogo, al diálogo institucional –como no se ha cansado de repetir por activa y por pasiva, igual que el ministro de Interior, Mariano Rajoy y el portavoz del PP en el parlamento vasco, Jaime Mayor Oreja. Para los populares es principal que el Partido nacionalista Vasco demuestre con los hechos que no actúa de contubernio con los radicales, a quienes les une su búsqueda de la autodeterminación, a pesar de que unos y otros usen diferentes medios para lograr dicho objetivo. La autodeterminación, que es el derecho por el cual los ciudadanos de un territorio con unas características –difíciles de determinar- podrían elegir que ese territorio puede independizarse de la matriz en la que se integra hasta ese momento. Quizás sea la mayor preocupación de Ibarrtexe y de su partido político, que lo ha plasmado en el programa político como importante tema a debatir. Aznar ha rechazado, en una entrevista a La Vanguardia, cualquier tipo secesión de ninguna parte de España. Es su firme convicción y es consecuente con su modelo de Estado para España. Establecer que el fin del terrorismo sea el objetivo fundamental de la actividad política vasca es el objetivo de Aznar en el encuentro. Que sea también el del lehendakari, Juan José Ibarretxe, y que sea un objetivo desligado de todo tipo de contrapartidas políticas es la incógnita por despejar.