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ACCIDENTE AVIÓN

Yak-42, primer aniversario de la tragedia

Por Cristóbal CabezasTiempo de lectura1 min
España30-05-2004

El ministro de Defensa, José Bono, presidió el homenaje celebrado en recuerdo de los 62 militares muertos en este accidente que, hace un año, tuvo lugar en el municipio turco de Trebisonda.

La emotividad fue la nota dominante en el viaje a Turquía. En la zona exacta del trágico siniestro aéreo, 152 familiares de 58 de los fallecidos, llegados desde España, se toparon el peor escenario posible que nunca hubieran querido conocer: el pedazo de tierra en el que perdieron la vida. Las familias, desoladas y abatidas, subieron a la cima del monte Pilav para ver con sus propios ojos el tétrico lugar en el que todavía quedaban restos esparcidos del siniestro. El Ministerio de Defensa español les había advertido de que, aunque los responsables de la investigación -comenzada hace un año- habían “limpiado el lugar”, no descartaban que pudieran encontrarse con objetos personales de los desaparecidos. La tristeza por los sucedido no ha hecho más que fortalecer el espíritu de las familias, algunas de ellas unidas en torno a la Asociación por las Víctimas del Yak-42, que preside Carlos Ripollés. El acto celebrado en Trebisonda consistió en la inauguración de dos monumentos: un obelisco, erguido en el lugar preciso del accidente, que representa la vida segada de los militares y una estatua que simboliza a un soldado turco rescatando a otro español, levantada en la plaza que, recientemente, se ha bautizado con el nombre de Plaza de la Amistad Hispano-turca, en pleno corazón de la localidad de Maçka, la más cercana al punto en el que se produjo el siniestro.