COMISIÓN PARLAMENTARIA

El PP consigue que el Congreso investigue los hechos del 11-M

Por Raúl Romero Martín2 min

España05-05-2004

El PSOE se sumó el miércoles a la petición del PP de crear en el Parlamento una comisión de investigación sobre el atentado del 11-M. Dicen que no buscan responsabilidades políticas, pero no descartan la comparecencia de ningún cargo público, ni si quiera la de José María Aznar. Ahora bien, quiere que la investigación se extienda al antes, el durante y el después del día del atentado con "total transparencia y obtener conclusiones para evitar posibles tragedias".

Tras días de incertidumbre y de polémica, finalmente habrá comisión de investigación sobre los atentados del 11 de marzo. Si el pasado hubo comisión de investigación para rato en la Asamblea de Madrid, este verano habrá comisión en la Carrera de San Jerónimo. Sus señorías se quedarán sin vacaciones porque el PSOE se vio obligado a seguir los deseos del PP de que el Congreso investigue lo sucedido el 11-M, a pesar de que hasta el momento se había mostrado más partidario de echar mano del artículo 53 del Reglamento, que permite otra fórmula de comisiones, en las que no se determinan responsabilidades políticas. La iniciativa del PP, al proponer directamente la comisión de investigación, cortó el debate entre el PSOE y los restantes grupos, que inmediatamente se sumaron a la petición de Mariano Rajoy. La propuesta del líder de la oposición no se ciñe sólo al 11-M, sino a lo que hicieron tanto el Gobierno como los partidos entre el 11 y el 14 de marzo. Los populares no tienen "nada que ocultar" y por eso piden la comisión de investigación, sentenció Rajoy respaldado por Ángel Acebes y Eduardo Zaplana. En la comisión las comparecencias son obligatorias, mentir está penado y no asistir es un delito, además de que se pueden pedir responsabilidades políticas. Todas esas características quiere el PP que tenga la comisión sobre "todo lo que ocurrió en España entre el 11 y el 14 de marzo". Eso quiere decir que se investigue no sólo lo que hizo el Gobierno, sino el PSOE, en la oposición, y otros grupos y personas, como los que protagonizaron las manifestaciones frente a las sedes del PP. Y para que "toda la verdad se sepa", el líder del PP anunció la "total disponibilidad de todos los cargos del PP para asistir a la comisión". Rajoy pidió, "en justa reciprocidad", que el PSOE no vete la de "ninguna autoridad, responsable ni cualquier persona". El PSOE, poco partidario de la investigación, prefería esperar a que se levantara el secreto de sumario ya que las encuestas le son favorables de cara a las elecciones europeas del próximo 13 de junio. Pero el PP de Rajoy ha desmontado la estrategia de los socialistas y por primera vez el Congreso va a constituir una comisión de investigación cuando aún no ha celebrado ni su primer pleno ordinario de la legislatura y para indagar sobre hechos ocurridos bajo un gobierno anterior. Dicho lo cual, Zapatero empezará una ronda de conversaciones con el resto de los grupos para consensuar un texto del que, presumiblemente, se desmarcará el PP. Las reglas, las pondrán los socialistas. Faltan por determinar los plazos y conocer si las comparecencias serán públicas, una opción que, en principio, cuenta con el beneplácito del PSOE salvo en las deliberaciones que «afecten a la seguridad nacional».