CINE

Se celebra el centenario de Joan Crawford

Por Eduardo Iglesias1 min

Espectáculos23-03-2004

Joan Crawford fue una de las actrices míticas del Hollywood clásico. Con menos grandes película a sus espaldas que otras mujeres, su personalidad -era conocida como la dama- y su complicada vida amorosa la llevaron al estrellato y al recuerdo perpetuo en el mundo del cine. Su muerte sucedió hace 27 años.

Ganó su primer y único Oscar en 1945 como protagonista de Alma en suplicio, dirigida por el húngaro Michael Curtiz. En su gran noche tuvo mala suerte. Estaba enferma y no pudo recoger el premio. Volvió a ser candidata en dos ocasiones, pero nunca más lo ganó. Crawford había llegado a Hollywood a través del baile y con el aliciente de su gran belleza. Sus primeros trabajos fueron de extra con su nombre original, Lucille Le Sueur. Su verdadero despegue al estrellato le llegó después de su matrimonio en 1929 con Douglas Fairbanks Jr., el segundo de cinco -el último de ellos con el presidente de Pepsi-. El año anterior había alcanzado bastante fama con su protagonismo en Our dancinng daughters. Siguió su carrera trabajando con cineastas como George Cukor (Mujeres), Frank Borzage (La isla del diablo) y Robert Aldrich (Hojas de otoño). Su película más importante es quizá Johnny Guitar, dirigida por Nicholas Ray en 1954, aunque en esos mismos años perdió la oportunidad de trabajar en De aquí a la eternidad. Su último título recordado ha sido¿Qué fue de Baby Jane?, que la puso al lado de su rival Bette Davis, otra gran actriz de carácter. Sus últimos años, hasta su retiro en 1975, fueron de películas mediocres y trabajos en televisión. En la serie Night gallery le dirigió un veinteañero Steven Spielberg, a quien no le dejaba sentarse a su lado para que no le confundieran con su gigoló. Un símbolo del paso del viejo Hollywood de las estrellas clásicas a los nuevos directores de los 70 y los 80.