Los errores en los bombardeos muestran la crudeza de la guerra
Por Isaac Á. Calvo 1 min
Internacional30-03-2003
La muerte de civiles iraquíes se incrementó considerablemente la semana pasada después de que algunas bombas de Estados Unidos alcanzaran objetivos no militares en Bagdad y sus alrededores.
La campaña de bombardeos que la coalición anglo-estadounidense está lanzando sobre Irak tuvo la semana pasada algunos de los episodios más cruentos. Varios proyectiles alcanzaron edificaciones civiles y al menos 90 personas murieron y cientos resultaron heridas. Los hechos más graves se produjeron el pasado miércoles y también el viernes cuando los misiles alcanzaron dos mercados en Bagdad, capital de Irak. En el primer error, 15 civiles perdieron la vida. En el segundo daño colateral fueron al menos 55, los iraquíes que perecieron. “Donde ha caído el misil, no hay instalaciones militares ni del gobierno”, apuntó uno de los responsables del hospital donde fueron llevadas las víctimas. Otra docena de civiles falleció en diferentes ataques en los alrededores de Bagdad. Desde el Mando aliado ubicado en Qatar se anunció la apertura de una investigación para aclarar lo sucedido. Aun así, tampoco se descartó que el régimen del presidente de Irak, Sadam Husein, estuviera utilizando a la población civil como escudos humanos y para propaganda. Mientras tanto, los tropas aliadas siguen perdiendo miembros como consecuencia de accidentes o enfrentamientos entre ellos. Durante la semana pasada, un soldado británico murió y otros cuatro resultaron heridos cuando el vehículo blindado en el que viajaban fue alcanzado por una bomba lanzada desde un avión estadounidense. Además, al menos 40 marines de EE.UU. tuvieron que abandonar el campo de batalla después de ser alcanzados por el mal llamado fuego amigo.