BALONCESTO

Bodiroga, el corazón de Pesic

Por Daniel Ayllón1 min

Deportes23-02-2003

El yugoslavo es el eje referencial de un Barcelona que cambia con los tiempos. La igualdad que había entre todos los jugadores en la época de Aíto García Reneses ha dejado paso a la emersión de los jugadores franquicia, al más puro estilo de la NBA.

El Barcelona de la temporada 2002/2003 nada tiene que ver con los equipos que manejó Aíto en los años anteriores. La profundidad de banquillo ha dejado su lugar a un conjunto estructurado alrededor de un quinteto base: el lituano Sarunas Jasikevicius, Dejan Bodiroga, la Bomba Navarro, Gregor Fucka y Roberto Dueñas. Éste, formado por jugadores de primer nivel internacional, tiene el respaldo de una serie de jugadores como Nacho Rodríguez y Rodrigo de la Fuente, que lejos de acercárseles en el panorama ofensivo, se dejan la piel atrás. La principal carencia de esta plantilla es la falta de unos postes de seguridad que den minutos de descanso a los titulares sin bajar el ritmo. Para solucionar este desaguisado, Pesic coloca frecuentemente a Bodiroga en la posición de ala-pívot, lo que le permite jugar con cuatro hombres exteriores y dejar más espacios de trabajo a Dueñas. El jugador yugoslavo, nombrado MVP de la Copa del Rey, puede manejarse a las mil maravillas en cualquiera de las posiciones. Su combinación de altura, velocidad y excelente técnica individual le permite subir el balón, lanzar, rebotear y jugarse los uno contra uno sin problemas. Pertenece al patrón de aleros versátiles que pueden jugar cerca del aro -como el Chapu Nocioni o el retirado Andrés Jiménez, por ejemplo- y manejar el balón con comodidad en el perímetro. El balcánico promedió 24 puntos de valoración en la Copa del Rey de Valencia y fue el jugador que asumió, junto a Jasikevicius, la responsabilidad de jugarse las canastas decisivas en el equipo azulgrana. Sin embargo, a pesar de ser un jugador eminentementge ofensivo e individualista, recupera también balones en defensa y reparte asistencias en ataque.