Toros
Un baile con la más fea
Por Almudena Hernández Pérez2 min
Espectáculos15-06-2001
Era la festividad de San Antonio y en Madrid todavía las mozas -y las que no lo son tanto- guardan esa costumbre de buscar novio en una pila de alfileres. Sobrevive, como puede y eso parece, el casticismo, por lo que la empresa del Palacio de Vistalegre programó una feria taurina para celebrar la solemnidad.
Mas, debe haber por la capital de España ausencia de novios y novias, pues por los tendidos cubiertos del coso carabanchelero pasaron muy pocas almas, a pesar de que los carteles anunciaban atractivos nombres de toreros -sobre el papel, claro-. El día del santo, sin embargo, sí acudió el personal -emparejado o no-, pero a la Monumental de Las Ventas, donde se celebró la corrida de la Beneficencia. Después de San Isidro había nostalgia de toros. En el cartel, toros de Victorino Martín y tres diestros a los que por voluntad y ganas no les debería fallar tanto la pareja de los despachos: Luis Miguel Encabo (el único de la terna que saludó tras dar muerte a sus toros), Alberto Ramírez y Rafael de Julia. En la que se supone la tarde más importante de la temporada no hubo beso de puerta grande. Fallaron las cosas, la experiencia, por ejemplo; el juego de los toros, verbigracia. La tarde del 15 de junio en Las Ventas ha sido ese fin de fiesta en el que los toreros que encabezan el escalafón no han querido bailar con la más fea. Cuestiones de definición de belleza. Muchos fueron los diestros que se negaron a hacer el paseíllo en la Beneficencia después de un San Isidro insólito, regular, malo, peor o pésimo -sin tener en cuenta los detalles-, según los casos. Ante el mal de amores de aquellos que no quieren buscar pareja castiza y madrileña (sea en Las Ventas o en Vistalegre) las ferias del norte han decidido ponerse guapas para el verano. Una vez que en el Corpus salpicase la Fiesta por ejemplo en Granada, donde David Fandila El Fandi triunfó y decidió detener su temporada por una lesión, Santander ha puesto en la calle los carteles. La Feria del Norte celebrará del 21 al 28 de julio siete corridas de toros y una de rejones, y allí, todos -sobre el papel anunciador- van a buscar pareja de triunfo. Con la ayuda, que falta hace, del santo castizo San Antonio.