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AEROLÍNEAS ARGENTINAS

Cesa el bloqueo de Aerolíneas al negar la quiebra de la compañía

Por Beatriz FernándezTiempo de lectura1 min
Economía15-06-2001

Calma, de momento, en el aeropuerto de Buenos Aires. Mejor dicho, más que calma, vuelta a la normalidad. Los trabajadores de la empresa Aerolíneas Argentinas han decidido acabar con los incidentes y bloqueos de vuelos que han mantenido toda la semana como protesta por la situación económica de la compañía. Mantendrán esta tregua hasta que conozcan el resultado del viaje del ministro argentino de Infraestructuras, Carlos Bastos, a España.

Pero el viaje no ha dado los frutos que se esperaban. Bastos ha viajado a España con la intención de arrancarle a la SEPI bien una cesión a las peticiones de los sindicatos bien una ayuda económica de 70 millones de pesetas. El 90 por ciento de la compañía está hoy en manos de la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI). Una sociedad que presentó un plan de viabilidad para intentar sacar de la quiebra a la empresa, pero a los trabajadores la idea no les gustó nada, porque, entre otras medidas, el plan pasa por recortes de personal y suspensión de pagos. La SEPI, de momento, no da su brazo a torcer: no habrá apoyo económico hasta que todos los sindicatos acepten el plan de viabilidad. Al Gobierno argentino le quedan entonces sólo tres acciones: obligar a los sindicatos a firmar el plan de viabilidad para recibir de la SEPI dinero, apoyar económicamente a la empresa para que no quiebre o transferir la compañía a nuevos inversores. Lo más probable es que se incline por la primera opción. Este jueves el Consejo de Administración de la compañía aprobará la suspensión de pagos para renegociar la deuda. Esta medida puede que presione a los trabajadores para que acepten el plan. Ellos querían prorrogar la crisis ocho meses más mientras que se elaboraba un plan de saneamiento. El presidente de la SEPI, Pedro Ferreras, considera imposible esta opción porque "cada mes de retraso añade entre 30 y 35 millones de dólares de pérdidas". Es decir, entre 6.000 y 7.000 millones de pesetas. Tras invertir unos 350.000 millones en la compañía, la SEPI no está dispuesta a dar más dinero y quiere pasar el relevo de actuación al gobierno argentino.