EL ÚLTIMO ADIOS
Los restos de José Hierro descansan a orillas del Cantábrico
Por José Luis Carreras López
1 min
Cultura23-12-2002
La incineración de los restos mortales del poeta José Hierro en el crematorio de La Almudena de Madrid fue precedida por una ceremonia a la que asistieron la familia, amigos y personalidades del mundo de la cultura y de la política y durante la cual se leyeron dos poemas del artista fallecido.
El marido de una de las hijas del poeta, Manolo Romero, leyó el poema titulado Historia para muchachos del Libro de las Alucinaciones, mientras que la directora de la Fundación Antonio Gala de Córdoba, Elsa López, recordó los versos del poema Vida, que cierra el Cuaderno de Nueva York, obra con la que, según los críticos literarios, llegó a engrosar el libro de los grandes poetas de nuestra literatura en habla hispana. Tras la lectura de los poemas, los que acompañaron al féretro del poeta en La Almudena, entre ellos el secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca, y el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, guardaron un minuto de silencio. Las cenizas del poeta fueron trasladadas a Santander, ciudad en la que vivió la mayor parte de su vida. Allí serán colocadas en el pabellón de Personajes ilustres de la ciudad de Santander que alberga el cementerio de Ciriego. Pepe Hierro como le conocen sus colegas de "Verso" formó parte de la generación de escritores de la posguerra que comenzaron su carrera artística en los cuarenta y cincuenta; Francisco Umbral, Camilo José Cela... Hierro no sólo se dedicó a la poesía, su carrera profesional estuvo ligada durante casi treinta años a la enseñanza universitaria desde los claustros de la Menéndez Pelayo, en los que impartió literatura. Además estuvo al frente de dos revistas literarias en aquellos años de posguerra. Tiempos muy difíciles para personas inteligentes y con talento como José Hierro, quien pasó una temporada en la cárcel. Una vida dedicada a las letras, a la cultura. Una persona se echará de menos, y si no sólo ha hecho falta ver a sus amigos y compañeros de profesión durante estos días.