Las Bolsas, principales perjudicadas por los fraudes de compañías norteamericanas

Por Ana Romero Vicente 1 min

Economía28-06-2002

Los inversores tienen las manos atadas. La semana pasada fueron Worldcom y Xerox, pero antes muchas otras como Enron y Gescartera, en España. La desconfianza se extiende y ahora ir con los ojos bien abiertos parece no ser suficiente.

La caída de las Bolsas son inevitables cuando ni siquiera las autoridades bursátiles se enfrentan a las situaciones de fraude. La búsqueda de beneficios a toda costa por la compañía Worldcom y de nuevo el encubrimiento de ello protagonizado por la auditora Arthur Andersen arrastró a todos los mercados capitales. Ya se sabe que cuando algo ocurre en EE.UU. rápidamente se extiende por el resto de mundo. La nueva ocultación de pérdidas de una empresa tan importante como Worldcom provocó un impacto que no se dejó esperar. Y especialmente las plazas europeas fueron las más perjudicadas, donde se llegaron a registrar retrocesos superiores al cinco por ciento durante las primeras horas de la jornada. Por supuesto, fue el sector de las telecomunicaciones el que lideró el desplome, aunque al cierre de la sesión se aminoraron las pérdidas. El índice Euro Stoxx 50, en el que se incluyen, las principales empresas de la zona euro cedió un dos por ciento. En lo que concierne a España, el Ibex 35 no fue menos: llegó a situarse durante unas horas a mínimos cercanos a los del pasado 11 de septiembre, aunque al final concluyó con un descenso del 1,33 por ciento. Cada vez crece más la desconfianza: ya dejan de ser meras las sospechas que indicaban las escasa fiabilidad sobre las cuentas de grandes empresas. Además, los mercados son muy conscientes de que la bonanza financiera de compañías telefónicas ha llegado a su fin: las deudas no perdonan. En Francia, France Telecom lleva casi un año cayendo en su capitalización bursátil, y la semana pasada sufrió un duro golpe cediendo más de un ocho por ciento. También la primera operadora europea se dejaba un 4,42 por ciento y ya ha perdido más de un 64 por ciento en lo que va de año.