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MEDIO AMBIENTE

España no cuida sus recursos

Por Celia ParejaTiempo de lectura2 min
Sociedad30-05-2002

Han tardado en darse cuenta, pero los gobiernos miembros de la Unión Europea y de algunos otros países como Rusia y Japón están cada vez más preocupados y comprometidos con el medio ambiente. Los recursos naturales son imprescindibles para el desarrollo de los países y la pérdida de suelo fértil es un grave problema, no sólo para la economía, sino también para la supervivencia.

Jaume Matas, ministro de Medio Ambiente del Gobierno español, advirtió en la reunión informal de responsables en su área, celebrada la pasada semana en Mallorca, que "quien contamina, paga". Con esta medida, el Ministerio de Medio Ambiente pretende que las empresas tengan más cuidado con sus vertidos, vigilen sus instalaciones y procuren no contaminar. A la galopante desertización del suelo español hay que añadir la mala calidad de las aguas interiores nacionales. España estaba advertida por la Unión Europea desde 1998 de que sus ríos y lagos dejaban mucho que desear. Pero, en lugar de adecuar para el baño las aguas interiores se han cerrado aquellas zonas que no cumplían las condiciones impuestas por la UE. Por esta razón, la Comisión ha decidido multar a España. Sólo el 31,2 por ciento de las aguas de ríos y pantanos tienen la calidad suficiente. España es uno de los países de la UE con peores aguas interiores, únicamente superado por Reino Unido. En las playas la situación es más esperanzadora. Tan sólo las españolas se libran este año de las críticas. Las costas españolas recuperan este año el primer puesto en número de banderas azules, con 423. A pesar de que estos datos parezcan optimistas, el presidente de la Fundación Europea de Educación Ambiental, José Ramón Sánchez Moro declaró que sólo una de cada siete playas españolas tiene bandera azul. Es decir, sólo el cuatro por ciento del litoral español asegura el cumplimiento de los criterios exigidos de limpieza, seguridad y óptima gestión medioambiental. El medio ambiente ha pasado de ser algo insignificante para los gobiernos a ser una de sus principales preocupaciones. La Unión Europea presentó el pasado la ratificación del Protocolo de Kioto, en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York. Gracias a la ratificación simultánea de los 15 se cumple la primera condición para la entrada en vigor del Protocolo. Ya son 69 los estados firmantes, superando los 55 necesarios. La segunda condición, que los Estados firmantes deben representar el 55 por ciento de las emisiones mundiales de efecto invernadero, aún está por cumplirse, ya que la tasa actual se sitúa en el 26,6 por ciento.