MUSEOS
Se ha inaugurado el museo arqueológico de Alicante
Por Pedro Fernaud Quintana1 min
Cultura27-05-2002
El museo exhibe 80.000 piezas, abarcando desde la prehistoria hasta la época moderna. Se trata del primer museo arqueológico del siglo XXI El Museo Arqueológico (Marq), contiene como principal atractivo el uso de las nuevas tecnologías para la difusión de los vestigios, desde la prehistoria hasta la época contemporánea.
Principia su andadura con 81.000 piezas, expuestas en el rehabilitado Hospital Provincial de Alicante. La inversión, costeada por las administraciones provincial, autonómica y central, ha superado los 33 millones de euros. La reina Doña Sofía inauguró oficialmente estas instalaciones, en un acto multitudinario cuajado de expectación. El Marq ha ido abriendo sus salas de manera escalonada desde que el 22 de septiembre de 2000. Exhibe en sus exposiciones temáticas permanentes restos arqueológicos que van desde la prehistoria, pasando por la cultura ibérica, la romana y la Edad Media, hasta la edad moderna. Como complemento a estas salas permanentes, en las que se muestran los principales fondos arqueológicos de los yacimientos de las comarcas alicantinas, se han habilitado otros tres espacios temáticos, de arqueología de campo, urbana y subacuática, que permiten al espectador conocer, a través de nuevas tecnologías y soportes audiovisuales, las técnicas y los ámbitos de estas especialidades arqueológicas. El auténtico valor histórico de los fondos expuestos en este museo se une la apuesta didáctica que se ha concebido para explicarlos y definirlos. La incorporación de las nuevas tecnologías permite a niños y a adultos, aunque no sean expertos en la materia, entender con cercanía y más calor los modos de vida, las costumbres y hábitos de sociedades anteriores. El Marq dispone para cumplirlo de 17 puestos interactivos y varias pantallas, que proyectan un total de 18 montajes audiovisuales distintos de los yacimientos y épocas analizadas. En total, más de tres horas de documentales para entender mejor el pasado. Un museo, pues, cargado de pasado, con la intención permanente de comprender las huellas que nos preceden con la ayuda del avance de la civilización presente. Productiva y bella combinación.