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EUROPA

La UE se defiende ante las medidas proteccionistas de Estados Unidos

Por Julia Almagro PadillaTiempo de lectura2 min
Economía28-03-2002

El ya denominado efecto dominó en el sector del acero ha comenzado. Estados Unidos implantó una política proteccionista, estableciendo unos aranceles del 30 por ciento, en los productos siderúrgicos. La Unión Europea no podía hacerse cargo de todas las importaciones que rechazaba Norteamérica, por lo que ha reaccionado estableciendo también medidas arancelarias que podían llegar hasta un 26 por ciento.

Se calcula que serán unos 15 millones de toneladas de acero las que no entrarán en Estados Unidos. En Europa se temía una avalancha de las importaciones hacia su territorio, por lo que Bruselas ha tenido que tomar decisiones al respecto. La medida ya está prevista y consistirá en el establecimiento de aranceles de entre el 14,9 y el 26 por ciento. Este recurso se aplicará durante seis meses y la sufrirán 15 productos. Bruselas opina que su resolución afectará al 40 por ciento de las importaciones. Los países más afectados serán China, Argentina, India, Australia, Brasil y Suráfrica. Es posible que los países en vías de desarrollo que estén afectados, noten el impacto negativo. La medida tendrá vigencia, según las previsiones, a partir del 3 de abril. La Unión Europea importa anualmente unos 27 millones de toneladas de acero, y esta cantidad podría haber sumado 15 millones más si no se hubiera reaccionado de la manera precisa. Los países que se verán exentos de las limitaciones impuestas por la UE serán aquellos que exporten un producto siderúrgico por volumen menor al tres por ciento del total importado por la Unión. Bruselas no sólo se limita a reaccionar ante las medidas proteccionistas estadounidenses en el sector del acero, sino que además ha contemplado la posibilidad de tomar represalias en lo concerniente a cítricos, papel y la industria metalúrgica de Estados Unidos. Alemania se muestra completamente contraria a esta opción, ya que este país exporta a Norteamérica, al año, 55.000 millones de dólares, principalmente, en la industria automovilística. El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, y el comisario de Comercio, Pascal Lamy, apuntaron que cada país "es soberano de las decisiones que adopte". Lamy aclaró que la UE "nunca habría recurrido a medidas de este tipo si el mercado de acero norteamericano hubiera permanecido libre".