ARGENTINA

El peso argentino alcanza los infiernos de su cotización

Por Raquel González2 min

Economía31-03-2002

Argentina sigue batiendo récords, ésta vez el protagonista es el peso. La moneda tocó fondo el pasado lunes, recién estrenada la semana. El cambio oficial alcanzó los 3,90 pesos por dólar. Las reacciones fueron en cadena. Los ciudadanos se lanzaron a la calle a generar largas colas en las casas de cambio donde poder comprar dólares.

El peso, ha quedado demostrado, es una moneda débil, voluble y con clara tendencia a la depreciación. Por eso, los pocos argentinos que aún disponen de cierta liquidez se lanzaron a la compra de la moneda fuerte y segura a corto, medio y largo plazo: el dólar. No ha sido ésta la única consecuencia del hundimiento del peso. Los precios de los productos más básicos han hecho un sprint que hace temer el retorno del fantasma de la hiperinflación. Ese temor no queda tan lejos, muchos productos ya aparecen remarcados y lo que un día cuesta dos pesos, a los dos días puede haber duplicado su precio. Según la Asociación de Defensa del Consumidor (ADELCO), los precios de la cesta de la compra aumentaron, sólo en el mes de marzo, un 13 por ciento. Como ejemplos, la carne cuesta ahora un 20 por ciento más que el mes pasado y el tabaco un 10 por ciento. El Gobierno, que tuvo que intervenir para enfriar el mercado cambiario, ha asegurado que se centrarán seriamente en controlar el aumento de los precios. Esta batalla es una de las principales que ocupa al presidente Eduardo Duhalde, pero no la única. Ahora mismo el presidente Duhalde está pendiente de la llegada de una nueva comisión del Fondo Monetario Internacional (FMI) para ver si de una vez por todas se deciden a ofrecerles la tan ansiada ayuda económica que reclaman. Además, el presidente argentino y su gabinete está estudiando poner en marcha un plan de ayudas del que se conocerán datos certeros a lo largo de esta semana. De momento, se sabe que se basarán en subsidios para las familias más necesitadas y para aquellos ciudadanos que se encuentren sin trabajo. La sensación de incertidumbre planea sobre las cabezas de los argentinos, pero hay algo que la mayoría de ellos tienen claro, y es que el único modo de salir de ésta es a través del sistema democrático. Esta semana se cumplieron 26 años del golpe militar que inició la dictadura argentina encabezada por Jorge Rafael Videla y miles de personas se concentraron para mostrar su rechazo absoluto a los movimientos dictatoriales y, de este modo, tranquilizar al sector de la población que teme que cualquier día estalle una guerra civil en Argentina o que los militares se hagan otra vez con los mandos del país.