ALCOHOLISMO JUVENIL
Beber alcohol se convierte en un ocio para jóvenes de 13 años
Por Rodrigo Romero2 min
Sociedad12-06-2010
Más pronto, con mucha más asiduidad y mucho más conscientes de lo que beben. De esta manera se puede resumir el informe presentado por la sociedad científica Socidrogalcohol acerca del consumo juvenil de bebidas alcohólicas. En él se describe el desconocimiento de los riesgos que causa biológicamente la ingesta del líquido. Muchas dudas que se han convertido en un ocio.
La diversión de sentirse hebrio es, a día de hoy, más una moda que una forma de entretenimiento. De ahí que la edad inicial sean los 13 años a pesar de que los expertos advierten de que el cuerpo no está aún preparado para recibir líquidos etílicos. María Teresa Cortés Tomas, de la Facultad de Psicología de la Universidad de Valencia, es la autora principal de esta investigación que ha sido presentado en Madrid durante una conferencia organizada por la sociedad científica Socidrogalcohol. El ensayo, financiado por el Plan Nacional de Drogas (2004-2007), se ha llevado a cabo en tres ciudades de la Comunidad Valenciana (Valencia, Castellón y Alicante) con estudiantes de la ESO, Bachiller y Ciclos Formativos, de un centro público y otro concertado de cada distrito educativo, con el fin de que así quedaran representadas todas las zonas. Durante el ensayo, los investigadores realizaron entrevistas a los estudiantes y universitarios sobre diferentes aspectos relacionados con el botellón, como ingesta, regularidad de la conducta, motivos o las expectativas que se tienen a la hora de la ingesta. Los datos revelan que en el proceso de ingestión de alcohol se llegan a doblar las cantidades que se consideran de riesgo (60 gramos en chicos y 40 en chicas). Y este hecho se produce una o dos veces por semana de nueve a diez meses al año. "Un 41 por ciento de los chicos de 15 a 18 años bebe para emborracharse", recuerda Francisco Pascual, médico y asesor técnico de Federación de Alcohólicos Rehabilitados de España. En cuanto al tipo de bebidas consumidas, "en general se aprecia un predominio de destilados y de alcohol de graduación media aunque no puede obviarse el consumo de fermentados al ser utilizados por el 50 por ciento de los jóvenes de todas las edades", se documenta en el trabajo. Tanto María Teresa Cortés como su equipo reiteran la necesidad de "intervenir sobre la permisividad que muestra tanto la sociedad como los referentes importantes para el sujeto, hacia el consumo de alcohol juvenil y hacia la normalidad con la que se ve que el ocio de los jóvenes se lleve a cabo durante la noche". No es extraño que, convertido en una moda, el hábito de beber alcohol entre jóvenes se extienda a todos los ámbitos de sus vidas. El hombre se acaba adaptando a todo. Y no es extraño que la edad de comienzo siga avanzando. Para evitarlo, los expertos optan por que los jóvenes no asocien el alcohol con la diversión, sino con los perjuicios que puede tener sobre su desarrollo físico y biológico, como el envejecimiento prematuro, el aislamiento social o el desarrollo de determinadas patologías.