ELECCIONES

Los vascos cierran la puerta al soberanismo del PNV y se la abren a López

Por Esteban del Pozo3 min

España01-03-2009

Después de 30 años de nacionalismo en el País Vasco el cambio hacia posturas constitucionalistas puede ser una realidad. La unión del Partido Socialista, el Partido Popular y Unión Progreso y Democracia da a la mayoría absoluta a este bloque de formaciones que apuestan por la Constitución a diferencia de lo que se ha vivido con el PNV a lo largo de toda la etapa democrática en España.

El PNV ha ganado las elecciones con un amplio margen de victoria e incluso ha mejorado los resultados del año de 2005. Ha pasado de tener 29 escaños a 30 pero se ha quedado lejos de los 38 que otorgan la mayoría absoluta. De un crecimiento todavía mayor puede presumir Aralar, un partido situado en la izquierda abertzale que renunció y condena el uso de la violencia. Sube de uno a cuatro escaños. Este aumento puede tener su explicación en la ilegalización de las formaciones proetarras Askatasuna y Democracia 3 Millones. Pero pese a la presencia del nacionalismo en la sociedad vasca parece que cada día más se empiezan a rechazar los planteamientos que apoyan un mayor soberanismo como el que ha enarbolado el candidato del PNV, Juan José Ibarretxe, en sus últimos años de mandato cuando impulsó sin éxito el denominado Plan Ibarretxe y un referéndum de autodeterminación. En esa órbita también se encontraban sus hasta ahora socios de Gobierno: Ezker Batua (EB) y Eusko Alkartasuna (EA). Este último fue de la mano con el PNV en las anteriores sufragios y su renuncia a esa unión le ha provocado una caída muy considerable. Ha cosechado sólo dos escaños. También baja EB, la marca de Izquierda Unida en esa región, que ha pasado de tener tres a un sólo representante en el Parlamento Vasco. El partido que mayor aumento ha sufrido ha sido el Partido Socialista que pasa de tener 18 representantes en el Parlamento del País Vasco a ocupar 24 asientos. Si a estos se le suma los 13 escaños del PP, que tiene una gran caída de votos, y el de UPyD podrían formar un tripartido que alcanzaría la mayoría absoluta y catapultaría a Patxi López a la Lehendakaritza. Si al final sucede este pacto a tres se produciría un cambio que se lleva intentando varios años atrás. Los primeros en intentarlo fueron Mayor Oreja, representando al PP, y a Nicolás Redondo Terreros, liderando al PSOE, aunque los escenarios y los discursos han cambiado considerablemente. A pesar de ello existe la posibilidad real de que populares, socialistas y UPyD se pongan de acuerdo y llevar el cambio. Así lo expresaba el Secretario de Organización del PSOE, José Blanco, que afirmaba que "se abre una nueva etapa política en Euskadi. Hay un claro deseo de cambio en la sociedad". Las dificultades que conllevaría esta alianza es la unión que mantienen el PSOE y PNV en el Congreso de los Diputados donde en los últimos presupuestos votaron a favor de los socialistas. Situación parecida se vivió en Cataluña con la victoria de José Montilla, desde la organización del partido se le intentó forzar a darle sus votos a Convergencia y Unión ya que este había dado su apoyo al estatuto de Cataluña pero Montilla se negó y repitió el tripartito. Los mensajes desde el PNV se encaminan hacia un entendimiento con el PSOE, el mismo día de las elecciones, Ibarretxe, confirmaba su idea de "sacar este país adelante, pese a las dificultades“. “Lo vamos a liderar, con los demás, pero lo vamos a liderar", dijo. Lo que no deja lugar a la duda es la división en la sociedad respecto a los dos grandes bloques políticos que forman el Parlamento Vasco. Los nacionalistas y constitucionalistas están separados por un escaso puñado de votos.