ELECCIONES VASCAS
La primera campaña sin ETA arroja un futuro incierto para el PNV
Por Alejandro Requeijo2 min
España15-02-2009
El PNV saca toda su artillería frente al socialista Patxi López muy convencido de que se sentará en el sillón de la Lehendakaritza. Los populares acusan el cambio de líder y los partidos nacionalistas minoritarios intentan sacar partido de las ilegalizaciones en las primeras elecciones que no dejarán entrar en el Parlamento vasco a quienes no condenan la violencia.
Los últimos datos del CIS dan un espectacular despegue a los socialistas vascos ante los comicios del próximo 1 de marzo, que pasarían de tener 18 diputados a 26. Aún así, el PNV seguiría liderando la carrera por la Presidencia vasca con 27 ó 28 escaños. La marcha de María San Gil les ha salido cara a los populares vascos: su representación en la cámara de Vitoria bajaría de 15 escaños a 11 ó 12. Lo mismo que a Eusko Alkartasuna: de los 7 parlamentarios actuales pasarían a tener 3 ó 4. Ezker Batua (IU) y Aralar empatarían a 3 y se vislumbra la entrada de UPyD, el partido de Rosa Díez con un posible escaño por Álava. Ibarretxe desconfía este panorama y así lo hace ver en los mítines. No se enfrenta con el candidato socialista, Patxi López, sino que apunta más alto: directamente a la Presidencia del Gobierno y le pregunta a José Luis Rodríguez Zapatero, si “en lugar del 8 por ciento de paro” viene a proponer “el 14 por ciento”. El candidato nacionalista repitió en sus mítines que el “objetivo” de PSE-PSOE y de PP es “echar al nacionalismo de Ajuria Enea” y que ellos quieren “atender los problemas de la sociedad”. Precisamente, durante su visita al País Vasco, el presidente Rodríguez Zapatero replicó que los vascos necesitan a “un lehendakari que se preocupe por los problemas de la gente “y no viceversa” como con “la consulta, el plan o el referéndum”. Patxi López apela al cambio y al autogobierno y dice que hay que practicar un “liderazgo positivo” poniendo en valor lo que “une” a los vascos y no lo que les “divide”. Con esos resultados, populares y socialistas podrían pensar en jugar juntos sus cartas, pero los mensajes se enfrentan. El PP acusa al PSOE de “ayudar al nacionalismo”. El presidente del PP, Mariano Rajoy aseguró que “siempre que un nacionalista tiene un problema de votos, allí aparece un socialista echándole una mano”. Su candidato, Antonio Basagoiti, puso el acento en “la derrota del terrorismo”, “queremos y sabemos hacerlo” destacó. Así está la situación al inicio de la campaña en las que, por primera vez, no va a haber papeletas de partidos que no condenen el terrorismo. Lo decidió, al filo del arranque de campaña, el Tribunal Constitucional. Askatasuna y D3M se quedaron con los carteles en la mano porque el Alto Tribunal aseguró que el proceso de anulación de sus listas había contado con todas las garantías constitucionales y que estaba suficientemente probado que ambas formaciones son instrumentos de Batasuna. La izquierda abertzale radical no se quedó en casa. Primero pidió el voto nulo con la papeleta de D3M.También durante una marcha que se celebró en Bilbao en apoyo a la formación a pesar de que el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, la había prohibido, hubo disturbios de todo tipo, quema de contenedores y lanzamiento de cócteles molotov incluidos. Todo eso enarbolando papeletas y carteles con la palabra DEMOKRAZIA.