FÚTBOL
Una victoria que apacigua los ánimos
Por Jesús Rosell
2 min
Deportes14-10-2007
Una victoria en Dinamarca puede cambiar, o por lo menos parcialmente, el concepto que se tenía de la Selección española. Buena imagen, buenos goles y la clasificación casi en la mano. La tormenta que se avecinaba y que estaba sobre el equipo de aleja de momento
La victoria de la Selección española ha supuesto un bálsamo dentro y fuera del combinado. La clasificación para la Eurocopa de Austria y Suecia de 2008 está a cuatro puntos y la imagen dada frente a los daneses da pie al optimismo, aunque moderado. Porque el juego del equipo español ha sido muy irregular, tirando a malo, a lo largo de toda la fase de clasificación. A partir de la derrota frente a Irlanda del Norte(3-2), que supuso el adios del capitán Raúl González, y de otros componentes. De nada sirvió la victoria inicial frente a Liechtenstein. La visita al campo de Suecia no hizo sino complicar aún más las cosas. La derrota por 2-0 dejó al equipo muy tocado anímicamente y a Luis Aragonés en el punto de mira de aficionados y prensa. Su continuidad estaba más discutida que nunca. Fue entonces cuando se le recordó la frase en la que se comprometía a abandonar el cargo si el equipo no llegaba a las semifinales del Mundial de Alemania. La derrota en octavos no hizo que el de Hortaleza abandonara su puesto, que consideró más oportuno enderezar el rumbo hacia el torneo europeo que dejar a los suyos en manos de un seleccionador nuevo. La savia nueva que llegaba al equipo no mejoraba el juego. Todo estaba desestabilizado. No había confianza en nadie, ni en los jugadores ni en Luis, que una y otra vez repetía que no se movía del banquillo. Las victorias que llegaron sólo relajaban el rumbo en la clasificación. Todavía no dependían de ellos mismos, pero se mantenían en la lucha final. El empate frente a Islandia hizo saltar de nuevo las alarmas, por el rival y por el juego, y ni la victoria poco después frente a Letonia mejoró la crítica. Fernando Hierro fue nombrado como Director deportivo de la Real Federación Española de Fútbol, muy discutida por sus decisiones y líos internos, con la misión de ser un enlace entre el órgano español y los jugadores. Lus Aragonés decidió no hablar con la prensa ni con los periodistas al sentirse insultado por los medios españoles. Aún mantiene su decisión, pero más calmado y más tanquilo con el resultado cosechado. La importante victoria frente a Dinamarca ha dado un cambio. El juego y la actitud de los jugadores ha cambiado la impresión negativa. La clasificación está a tiro. Sólo restan dos partidos, los dos en casa y frente a Suecia, primera de grupo, e Irlanda del Norte. El equipo de la Furia ha pasado a mejor vida y ahora parece que se prefiere al equipo del cerebro o de los jugones. Xavi Hernández, Cesc Fábregas o Andrés Iniesta han sustituido, por el momento, el debate de Raúl González. Luis Aragonés seguirá por decisión propia en el cargo. La afición está de nuevo ilusionada de cara a los próximos compromisos