SANIDAD
La autonomía donde se reside, clave ante una buena atención sanitaria
Una enfermera extrae sangre a un paciente en una clínica
Por Leticia Prado1 min
Sociedad09-03-2007
Cada una de las comunidades autónomas lleva a cabo su propio plan en cuanto a sanidad. Ellas mismas eligen lo que se puede hacer y lo que no dentro de su territorio y se lo presentan a los gobiernos regionales para poder sacarlo adelante. El traspaso de competencias sanitarias de la Seguridad Social a las comunidades autónomas ha aumentado aún más las diferencias entre ellas.
Todas tienen que decidir qué parte de los fondos del presupuesto regional se invierte en sanidad. Cada región ha elaborado sus propias leyes de salud. Pero todas tienen que asegurar una serie de prestaciones mínimas y comunes a todo el Estado. Así la responsabilidad ya no es sólo del Ministerio de Sanidad, sino que incumbe a cada una de las regiones. Una vez cubiertas estas prestaciones básicas, cada una de las comunidades ha ido reforzando la atención a las mismas o incluyendo nuevas necesidades a cubrir. Hay equilibrio en cuanto a que los requisitos primordiales están cubiertos. Pero las diferencias de infraestructuras sanitarias vienen de antes, pues se dotó mejor de servicios sanitarios a unas comunidades que a otras. Por ejemplo, el cambio de sexo es una de las prestaciones adicionales que no todas las comunidades cubren. Esta operación no está financiada por la Seguridad Social. Sin embargo algunas comunidades sí la ofrecen o lo harán en los próximos meses, como es el caso de Andalucía o Madrid. Estas operaciones, en clínicas privadas, oscilan entre los 12.000 y los 24.000 euros, dependiendo de cómo sea el cambio de sexo. Otro aspecto cubierto por muy pocas comunidades es el del testamento vital. En él, el paciente manifiesta cómo quiere ser tratado en el caso de que su salud no le permita expresarlo. Otras de las diferencias sanitarias que se perciben entre las distintas comunidades autónomas están relacionadas con leyes como la del tabaco o la del denominado "turismo sanitario". Ciertas regiones tienen que seportar un aumento de las consultas en periodos vacacionales como consecuencia del turismo, pero también por los extranjeros que acuden a España para no tener que pagar su tratamiento en la sanidad privada de su país de origen.