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CICLISMO

Landis y el ciclismo vencen en el Tour de Francia

Por Jesús RosellTiempo de lectura3 min
Deportes23-07-2006

Floyd Landis es el nuevo ganador del Tour de Francia. El corredor estadounidense sucede a Lance Armstrong en lo más alto del podio de París. Landis selló su triunfo en la contrarreloj individual de la penúltima jornada, después de una impresionante jornada de montaña en la que se resarció de una tremenda pájara sufrida el día anterior. Precisamente, las etapas de los Alpes se han caracterizado por el gran espectáculo ofrecido, que ha vuelto a enganchar al público.

Las etapas de montaña comenzaron con una espectacular jornada, con el paso de puertos durísimos como el Izoard, Lautaret y L’Alpe d’Huez. El español Óscar Pereiro llegaba como líder, aunque iba a perder esta condición en favor de Landis por tan sólo diez segundos. El de Phonak se mostró más agresivo que el español y su gran ascensión final tuvo como recompensa el liderato, aunque el luxemburgués Franck Schleck fue el primero en cruzar la meta de L’Alpe d’Huez. Pero el espectáculo que depararon los favoritos no se quedó ahí, y como pocas veces desde la aparición de Miguel Indurain y Armstrong, se buscaron las cosquillas e hicieron las delicias de los aficionados. Porque Pereiro, con una exhibición de raza, no tardó en volver a vestirse de amarillo. Fue en la etapa reina del Tour, entre Bourg D’Oisans y La Toussuire tras aventajar en más de ocho minutos a Landis, que tras llegar castigado por el (…), sufrió una tremenda pájara en La Toussuire. En una etapa con un claro sabor español, Carlos Sastre se sumó a la lucha por el podio tras ser segundo, en un etapón del danés Michael Rasmussen, fugado desde el primer kilómetro. Pereiro empezaba a creer que el Tour era posible y Landis veía escaparse un triunfo que tenía en la mano. En la décimo séptima jornada, el guión volvió a dar un vuelco. Landis se resarció con un larguísimo y, aunque finalmente no arañó el liderato, volvía a situarse como gran favorito, pues recuperó los casi ocho minutos de ventaja que tenía con respecto a Pereiro. Hubo un cierto cruce de acusaciones entre los equipos T-Mobile y CSC, que no ayudaron pronto a disminuir la ventaja de Landis. Aun así, el Tour volvía a mostrar una enorme igualdad. La jornada previa a la definitiva contrarreloj fue un trámite que se resolvió con la victoria de Matteo Tosatto, gracias –de nuevo– a una escapada de varios corredores, de la cual el transalpino fue el más inteligente. La penúltima etapa del Tour decidió el sucesor de Armstrong, y Landis no dio opción a la sorpresa: Serhiy Honchar (del T-Mobile) ganó su segunda etapa, pero Landis superó a su ex compañero Pereiro por casi un minuto. También destacó el esfuerzo del alemán Andreas Klöden, que desplazó a Sastre del tercer puesto. No dio para más: la última etapa estuvo dedicada a las celebraciones. Primero para el ganador del Tour, después para los otros campeones. En el paseo hasta París, Thor Hushovd ganó su segunda etapa. Luego, los héroes del Tour fueron desfilando por el podio: héroes porque, el primer año después de la era Armstrong, se descubrió que el buen ciclismo es posible, a pesar de los contratiempos.