ETA
Otegi mete prisa
Por LaSemana.es2 min
España06-05-2006
"Ya no caben excusas, dilaciones ni echar balones fuera". En estos términos se expresó el líder de la ilegalizada Batasuna Arnaldo Otegi. Al dirigente abertzale no le cuadra el calendario y por ello insta al Gobierno a que acelere los pasos de cara a la “solución pacífica del conflicto”.
En concreto Otegi aboga por "cerrar en los próximos dos o tres meses el primer acuerdo". Se refiere a establecer unas reglas de juego sobre las que asentar el diálogo político en el País Vasco. Esas condiciones pasan, entre otras exigencias, por legalizar a su formación a tiempo para llegar a las elecciones municipales del 2007. Una cita en la que Otegi se mostró confiado en que Batasuna no sólo “concurrirá” sino que además obtendrá un “magnífico” resultado. Además hizo su particular análisis de la situación tras el anuncio de alto le fuego de ETA. "Dos meses de tregua, cuatro detenidos, cuatro torturados, imposibilidad de Batasuna de hacer actos políticos, encarcelamientos, fianzas millonarias e imposibilidad de salir del territorio del Estado español". Estas declaraciones se producen después de que el secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, anunciase que el Gobierno cuenta con el aval de todos los partidos de cara a una posible negociación con ETA. Mientras la kale borroka volvió a protagonizar un episodio de violencia callejera. El coche de la concejal socialista por Getxo y miembro de la plataforma Basta Ya, Gotzone Mora, fue rociado con aceite de automóvil aunque finalmente no fue incendiado. Por su parte, el juez de la Audiencia Nacional, Fernando Grande-Marlaska clausuró la herriko taberna de Zamudio (Vizcaya) por dar cobertura económica a los terroristas. Todo esto cuando el PSE sufrió una nueva crisis interna. La formación tuvo que hacer frente a unas declaraciones de su parlamentaria Gemma Zabaleta. En ellas decía que sería “deseable” que se produjese un acuerdo de gobierno con Batasuna. El presidente del PSE, Patxi López, ha matizado que dicho pacto sería deseable, porque de producirse, significaría que “habríamos cubierto ya la etapa más negra de la historia”. La propia Gemma Zabaleta quiso dar carpetazo al asunto más tarde, indicando que dicha alianza “es simplemente imposible hoy por hoy” y que “habría que perder la cabeza para decir que se puede gobernar con Batasuna”.