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BALONCESTO

Barcelona y Real Madrid se citan en la Euroliga

Por Alejandro G. NietoTiempo de lectura3 min
Deportes30-03-2006

Barcelona, CSKA de Moscú y Maccabi han seguido una trayectoria paralela. Los tres tuvieron un comienzo muy irregular y no encontraron su mejor juego hasta bien entrada la primera fase. Pero luego se recuperaron, y los tres han sido los grandes dominadores del Top-16. Junto con ellos Real Madrid, Baskonia y Olympiakos hicieron méritos más que suficientes para meterse en cuartos de final.

‘Top-16’ El Barcelona dominó con autoridad el grupo D, en el que tan sólo cedió una victoria cuando ya no se jugaba nada. Los de Dusko Ivanovic presentaron una notable mejoría desde el perímetro, en el que Gianluca Basile ha mejorado su juego. Además, el Olympiakos sorprendió con un baloncesto muy dinámico, en el que un espléndido Tyus Edney mostró el nivel con el que condujo al Zalgiris –último del grupo sin ninguna victoria– al título en 1999. Contrastó con el poderío de estos rivales el Unicaja de Málaga, que pese a llegar como el mejor equipo del año falló en los momentos determinantes. El grupo E fue un mano a mano entre Maccabi y Real Madrid, después de que el Fortitudo apenas diera la talla en su primer partido, contra un paupérrimo Ülkerd de Estambul. Los blancos, brillantes en defensa y en ataque, comenzaron con tres exhibiciones –incluida una contundente victoria contra el Maccabi– que pronto le aseguraron la clasificación. Luego, con algunos problemas físicos en la plantilla, se relajaron y cedieron el liderato a un conjunto israelí letal por su versatilidad en ataque e intocable en su feudo. En el grupo F se confirmó el despertar del CSKA de Moscú y la seriedad del proyecto del Lietuvos Rytas. Los rusos, guiados por el alero esloveno Matjaz Smodis y el base John Holden, no tuvieron rival, ni siquiera en un combativo Baskonia que pronto quedó relegado a la lucha por el segundo puesto. Una plaza que consiguieron por los pelos, al salvar la mejor diferencia de puntos contra un Lietuvos que hizo gala de una gran garra e intensidad defensiva. El Bamberg, sin ningún triunfo, pasó desapercibido. La emoción hasta el último partido la hubo en el grupo G: después de un comienzo fulgurante del Cibona, el peor equipo de los clasificados en la primera fase, y de un pésimo arranque del Panathinaikos –un balance de 3-0 los croatas y 0-3 los griegos–, el conjunto de Zeljko Obradovic acabó forzando un cuádruple empate que los benefició, junto al Efes Pilsen, y dejó fuera al Benetton de Treviso. Ambos equipos, clasificados gracias a su mejor diferencia anotadora, fueron los únicos capaces de ganar uno de sus seis partidos por más de 12 puntos. Primera Fase No hubo grandes sorpresas, y de los ocho equipos eliminados, el menos esperado –aunque merecido– fue un Milán en plena transición, tras la llegada al banquillo, ya entrada la temporada, del mítico ex jugador Aleksandar Djordjevic. En el grupo A, el Baskonia dominó de principio a fín, en tanto que el Fortitudo hubo de remontar y aprovecharse de la relajación de Zalgiris y Benetton para alzarse con el segundo puesto. El modesto Bamberg se consolidó al poner en apuros a todos sus rivales y lograr la clasificación, en una meritoria quinta plaza. El grupo C, en tanto, tampoco tuvo mucha historia. Los cuatro favoritos –Panathinaikos, Unicaja, CSKA de Moscú y Real Madrid– pasaron sin problemas, aunque siguieron trayectorias dispares. Moscovitas y malagueños decepcionaron, con un comienzo desastroso, que luego hicieron olvidar con auténticas exhibiciones de buen baloncesto. Los helenos pelearon por el liderato con el Madrid, a los que las lesiones y la falta de actitud acabaron por descartar. El grupo B fue el que tuvo más chicha. El Barcelona protagonizó un arranque horroroso, que se agravó con la ausencia por lesión de Juan Carlos Navarro. Tampoco el Maccabi empezó bien, aunque en cuanto se conjuntaron los fichajes con el bloque campeón de la temporada anterior empezaron a subir como la espuma. Las sorpresas agradables fueron el Efes Pilsen, sólido líder durante la mayor parte de la liguilla, y el debutante Lietuvos Rytas, que incluso llegó a estar líder. Destacó además la endeblez del Olympiakos, que no encontró su juego hasta los últimos encuentros.