NATACIÓN
La técnica triunfa en waterpolo y sincronizada
Por La Semana.es2 min
Deportes31-07-2005
Aunque se le escapó el oro en la competición masculina contra Serbia, la plata y el título mundial femenino de Hungría reclaman la exquisita calidad técnica de los waterpolistas magiares. Otro país eslavo con tradición, Rusia, fue el gran dominador de la competición de natación sincronizada.
Waterpolo Desde que en 1993 Yugoslavia ganó el título mundial, Serbia y Montenegro no había vuelto a lo más alto del podio. Con el apoyo de una numerosa colonia, los serbomontenegrinos derrotaron en una vibrante final al campeón en Barcelona y campeón olímpico, Hungría. Serbia consiguió frenar con una excelente defensa el potencial ofensivo de los magiares y resarcirse de las derrotas que los húngaros les habían infligido en las últimas grandes finales. No obstante, el cansancio de los mejores jugadores -tanto de Hungría como de Serbia- fue evidente en la final, como consecuencia de un calendario muy cargado para los nadadores. En el capítulo femenino, también los dos mejores equipos disputaron la final. Aunque en este caso, Estados Unidos no tuvo opción para disputarle la medalla de oro a Hungría y se tuvo que conformar con caer en la prórroga después de levantar cuatro goles en contra en una brillante segunda mitad. En ambos casos, en una competición de 16 equipos, el Mundial constató las abismales diferencias de nivel entre los países punteros y aquellos que acabaron por debajo del décimo puesto. Sincronizada Rusia fue la gran dominadora por equipos, al copar el oro en todas las pruebas: Anastasia Davydova y Anastasia Ermakova, las líderes del equipo ruso, rozaron la perfección en los dúos y el combo. Tan sólo la francesa Virginia Dedieu, excelsa en la competición de solo, arrebató a las nadadoras rusas el pleno. No obstante, en la lucha por las medallas destacó el duelo entre Japón -que se hizo con una plata y dos bronces- y España, asentada definitivamente en la elite mundial, por delante de las nadadoras norteamericanas, tanto canadienses como estadounidenses. Larga distancia En la competición masculina, el estadounidense Chip Peterson y el alemán Thomas Lurz sumaron dos medallas -un oro y una plata, respectivamente- en las pruebas cortas. La dominadora del panorama femenino fue la holandesa Edith van Dijk, que se subió al podio en las tres pruebas: aunque sólo fue bronce en los cinco kilómetros, ganó el oro en las pruebas de diez y 25 kilómetros, en las que superó a la alemana Britta Kamrau. Saltos El canadiense Alexandre Despatie, doble medalla de oro en las pruebas individuales de uno y tres metros, se convirtió en el gran protagonista del Mundial. Con todo, los saltadores chinos confirmaron su dominio en la especialidad subiendo al podio en prácticamente todas las categorías.