Encarecer las bebidas alcohólicas frenaría su consumo en los jóvenes
Por Patricia García Serrano1 min
Sociedad12-09-2001
El alcohol sesga la vida de 55.000 jóvenes al año con lo que se convierte en una de las principales causas de muerte en la población juvenil. Por ello, el Comité Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió el pasado miércoles que se incrementen los precios de las bebidas alcohólicas para dificultar el acceso de los jóvenes a esta droga y frenar los estragos que causa entre la población de menos edad.
Según la OMS, una de cada cuatro muertes anuales de varones entre 15 y 29 años es imputable a la bebida. Es más, dicha organización ha constatado que los jóvenes beben para drogarse, y en este sentido, ha acusado a la industria alcoholera de "fomentar y alentar" esa tendencia con nuevos productos que, a su juicio, "se adaptan muy bien a la cultura de la droga". El consejero regional sobre drogas y alcohol de la OMS (organismo dependiente de las Naciones Unidas), Cees Goos, reclamó un "control mayor" sobre las actividades publicitarias y de patrocinio de la industria, porque son muchos los jóvenes que pierden su vida a causa de ingerir “descontroladamente” alcohol. Por todas estas razones, el Organismo Mundial de la Salud exigió la rápida implantación de las medidas que reclama porque, además, la bebida genera el nueve por ciento del gasto europeo en salud e incrementa los riesgos de enfermedades como la cirrosis hepática o los desórdenes mentales. Europa es el continente con mayor consumo de alcohol por habitante, concretamente el promedio en 38 países europeos es de 7,3 litros de alcohol puro por persona al año, y en este listado España se sitúa en la cabeza junto con Luxemburgo, Eslovenia, Irlanda, Francia, Alemania y la República Checa, ya que un español suele ingerir 10,1 litros de alcohol anuales. Finalmente, el consejero regional sobre drogas y alcohol advirtió sobre el peligro que tiene el que los jóvenes europeos hayan pasado de beber para "pasarlo bien" a convertir el alcohol en una droga "pura y dura". Incluso, Goos consideró que este drástico cambio se ve "fomentado y alentado" por las empresas de bebidas.