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MACROECONOMÍA

El FMI rebaja su previsión de crecimiento para España durante el 2004 y 2005

Por Mayra Ambrosio LaredoTiempo de lectura1 min
Economía14-11-2004

Mientras el vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes, insiste en que el precio del crudo es "coyuntural" y no afectará al crecimiento económico, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha advertido del peligro que supone y ha rebajado las perspectivas de crecimiento para España al 2,6 por ciento para el 2004 y 2005. Estas previsiones están, en ambos casos, por debajo del tres por ciento anunciado por el Ejecutivo de Zapatero.

La principal causa de esta reducción es el precio del petróleo. Hay que recordar que los Presupuestos Generales del Estado para el año 2005 se han elaborado teniendo en cuenta un crecimiento económico del tres por ciento, basándose en un precio del crudo de 33,5 dólares. Actualmente, el precio del brent ronda ya los 47 dólares. Pese a esto, el secretario de Estado de Economía, David Vergara, ha dicho que no es necesario ni conveniente revisar los pronósticos del Gobierno para el 2005. El FMI mantiene que los efectos del petróleo serán imperceptibles en el 2004 y que los indicadores actuales todavía revelan una buena demanda nacional, pese a la subida de la inflación. El organismo internacional evalúa la marcha de la economía española como “claramente positiva”, aunque critica el lento avance en la reforma del sistema de pensiones desde 1997, así como la reciente reforma de la Ley de Horarios Comerciales o el Plan de Choque de la Vivienda, cuyas medidas considera insuficientes. Aun así, el FMI respalda la política económica del Gobierno y apoya la modificación de la Ley de Estabilidad Presupuestaria para introducir el concepto de estabilidad a lo largo del ciclo. Los precios del petróleo no sólo afectan a España. A causa del oro negro, el Banco Central Europeo (BCE) también ha rebajado las previsiones de crecimiento de la zona euro. A pesar de que Europa crecerá menos, es importante mencionar que el euro comenzó, a mediados de octubre, una carrera alcista. La divisa europea ha alcanzado un máximo histórico situado en los 1,30 dólares.