Los sindicatos fijan paros para exigir al Gobierno que salve la industria naval
Por Gema Diego2 min
Economía19-09-2004
Los trabajadores de Izar están decididos a protestar todo lo que haga falta con tal de conservar sus puestos de trabajo. Los sindicatos de la constructora naval han convocado tres jornadas de huelga general para los próximos 21, 28 y 30 de septiembre, días en los que todos los astilleros efectuarán movilizaciones conjuntas, a las que se suman las que cada uno lleva a cabo a diario por iniciativa propia.
Cada astillero decidirá si convoca una huelga y una manifestación por las calles de la ciudad en la que está ubicado o un paro dentro de la propia factoría con una duración determinada. Los sindicatos mostrarán así su oposición al plan de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que cuenta con el apoyo del Gobierno para dividir a Izar en un sector de construcción civil y otro militar. Dentro del grupo de astilleros militares, la SEPI pretende incluir los de Ferrol, Cartagena, Cádiz y Puerto Real. En el plan estatal, estas cuatro factorías se integran en una sociedad pública, a la que se le permitiría recibir subvenciones. En el otro saco quedan San Fernando, Sestao, Sevilla, Gijón, Fene y Manises, astilleros que la SEPI quiere privatizar. Sobre Izar pende la amenaza del pago de las multas a Bruselas y el escaso volumen de contrataciones. Los trabajadores tienen miedo y quieren que el Gobierno deje clara su postura y salve el sector. El presidente del comité de empresa de Izar Sevilla, Ignacio Sánchez, se ha quejado “del talante que está demostrando el PSOE, con Zapatero que un día dice una cosa y al día siguiente se contradice”, en alusión al apoyo simultáneo que el presidente del Gobierno ha dispensado a los sindicatos navales y al plan de la SEPI. Pero no sólo los empleados de Izar temen por su trabajo. La industria auxiliar, que depende por completo de la actividad de los astilleros, está “asustada”, según el presidente de la Federación de Empresarios del Metal de Sevilla, Antonio Galadí. Éste ha afirmado que, puesto que este tipo de industrias suele funcionar a través de pagos aplazados y créditos, la muerte de la constructora de barcos de la que se nutren las conduciría hasta el cierre. Además, Estados Unidos ha logrado que Izar no participe en un negocio de construcción de corbetas para Israel. La administración de George W. Bush iba a recompensar a España con la concesión de un contrato de fabricación de plataformas y sistemas de propulsión para estos nuevos navíos israelíes por su apoyo en la guerra de Iraq. Pero el cambio de Ejecutivo ha dejado a Izar sin el premio gordo.