RUSIA
Putin anuncia una investigación y el Gobierno osetio es destituido
Por Chema García
2 min
Internacional12-09-2004
El presidente ruso, Vladímir Putín, anunció la semana pasada la apertura de una investigación interna para determinar qué ocurrió realmente en el trágico desenlace del secuestro de la escuela de Beslán en el que fallecieron más de 500 rehenes. Sin embargo añadió que la averiguación no será pública.
Putin defendió su actuación en la crisis y criticó a algunos países occidentales por su insistencia en llamar a los separatistas chechenos “rebeldes” en vez de terroristas. Asimismo, aseguró que Rusia está preparada para mostrar cierta flexibilidad hacia Chechenia en el futuro, pero “no con aquellos que no tienen inconveniente en disparar a niños”. El mandatario ruso se expresó de esta forma tras la manifestación que tuvo lugar en Moscú en condena del atentado. En ella decenas de miles de moscovitas se congregaron en la explanada junto a la Catedral de San Basilio, frente a los muros del Kremlin, en la mayor concentración contra el terrorismo celebrada en Rusia. La crisis se cobró el Gobierno de la república de Osetia. El Ejecutivo fue destituido por su presidente, Alexandr Dzasójov, quien sin embargo continuó en su puesto, porque según dijo “dimitir ahora sería abandonar al pueblo noroseta y retrasar la investigación sobre los sucesos de Beslán”. A día de hoy, lo que ocurrió en la escuela de Osetia del Norte es aún confuso. Todo parece indicar que el desenlace no se produjo porque las tropas rusas asaltasen la escuela. En este sentido, el mediador durante la crisis, el ex presidente ingushetio Ruslan Auchev, aseguró que la irrupción que condujo al tiroteo fue desencadenada por un grupo de civiles armados cuando aún se estaba negociando. Según Auchev se produjo una explosión de origen desconocido en el interior del colegio y los rehenes comenzaron a huir. “Pedimos al comando que dejase de disparar. Respondieron: 'Hemos dejado de disparar, son ustedes los que disparan'”, afirmó este responsable, quien añadió que se ordenó que parasen los disparos, pero hubo una tercera fuerza, las milicias populares, “que decidieron liberar por su cuenta a los rehenes”. Por su parte, el comandante en jefe de las tropas rusas de Interior, el general Nikolai Rogozhkin, anunció una “profunda y detallada investigación” de las acciones de sus fuerzas durante la crisis. Asimismo, el jefe del Estado Mayor de la Fuerzas Armadas de Rusia, el general Yuri Baluyevski, aseguró que Moscú está dispuesta a lanzar ataques preventivos contra bases terroristas en cualquier rincón del mundo. De momento, las autoridades rusas notificaron una recompensa de poco más de 10 millones de dólares -8,5 millones de euros- por cualquier información que permita eliminar a los líderes separatistas chechenos Aslán Masjádov y Shamil Basáyev. Todo ello, a pesar de que la Fiscalía no ha establecido aún que ellos estén detrás del secuestro de Beslán. Finalmente, el Consejo OTAN-Rusia se comprometió a vigorizar e incrementar sus esfuerzos comunes contra el terrorismo y desarrollar un plan de acción con medidas específicas para combatir esta amenaza.