ORIENTE PRÓXIMO
Las detenciones ordenadas por Arafat ocasionan división
Por David Hurtado
1 min
Internacional28-07-2001
Los grupos radicales palestinos Al Fatah y Hamás han mostrado su disconformidad con la decisión de Yasir Arafat de detener a varios miembros de estas organizaciones. Arafat trata así de que los radicales cumplan el alto el fuego firmado con Israel hace más de un mes.
Las milicias populares de Hamás y Al Fatah se manifestaron durante la pasada semana para protestar por el arresto de varios de sus militantes acusados de no respetar el alto el fuego. Los incidentes, en los que los manifestantes se llegaron a enfrentar con las Fuerzas de Seguridad del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat, se saldaron con un total de 10 heridos y otros tantos detenidos. Los arrestos que causaron la protesta fueron ordenados por el propio Arafat para tratar de que estos grupos radicales cumplan el alto el fuego acordado en los compromisos internacionales. Todo ello, en un intento por controlar al ala más extremista de la Intifada. Precisamente, para tratar de que estos acuerdos se cumplan por ambas partes llegó a la región Javier Solana, alto representante de la Política Exterior y Seguridad Común de la Unión Europea. Solana tenía el objetivo de lograr que el primer ministro israelí, Ariel Sharon, aplicara el plan de paz de la Comisión Mitchell y acepte a los mediadores internacionales acordados en la reunión del G-8 en Génova. Sin embargo, Sharon ya ha declarado que sólo acatará el Plan Mitchell cuando haya un alto el fuego absoluto. Este alto el fuego parece todavía lejano, ya que hay demasiados puntos que continúan separando a israelíes y palestinos. Arafat ha entregado a la CIA una lista de terroristas israelíes, entre los que figuran dos ministros, para que Sharon también proceda a su detención. Además, tampoco hay acuerdo en cuanto a los observadores internacionales, ya que Israel quiere que sean estadounidenses, mientras que la ANP reclama que haya también europeos. En los enfrentamientos, Israel respondió el pasado viernes a la muerte de un joven israelí con un ataque con carros de combate a tres posiciones de la unidad militar palestina Fuerza-17.