SIN ESPINAS
Sentido de Estado
Por Javier de la Rosa
2 min
Opinión24-11-2003
Me decía el otro día Nicolás Redondo Terreros que él está seguro de que “Zapatero es un hombre de Estado”. Esto cuenta el bueno del ex secretario general de los socialistas vascos después de que el “líder” del PSOE lo defenestrara por ser coherente en la defensa de la Constitución y firme en la lucha contra el nacionalismo. Redondo Terreros, de bueno, a veces parece tonto. Creo que no sabe que para ser un hombre de Estado no sólo basta con querer sino que hay que poder. Y Zapatero no puede, y lo peor, a veces parece que no quiere. Rajoy apuntaba el otro día la posibilidad sin exagerar ni andar descaminado: “El PSOE corre el riesgo de dejar de ser un partido de referencia nacional”. El Partido Socialista dice una cosa distinta en Barcelona que en Madrid, en La Coruña que en San Sebastián, en Pamplona que en Badajoz. Una cosa distinta y peor, contradictoria. Zapatero carece de aptitud para ser un hombre de Estado porque nadie puede afrontar una empresa que le supera. Sin embargo, su presencia en el cargo que inmerecidamente ocupa le confiere una responsabilidad que no puede desdeñar con su actitud. A la falta de claridad de ideas para tomar decisiones rápidas se le une una pusilanimidad evidente. El episodio de esta semana con el asunto de los pactos catalanes lo ha reflejado una vez más. Y el broche de oro lo han puesto el domingo obedeciendo a Esquerra Republicana al no votar en la FEMP contra la declaración que pedía la retirada del Plan Ibarretxe. El PSOE le echaba la culpa al PP de romper el consenso en ese órgano por presentar una declaración en defensa de la Constitución. Los socialistas decían que los populares habían utilizado la unidad nacional para armar lío. ¿Es que la defensa de la unidad nacional española puede ser alguna vez una excusa para romper el consenso en una Federación de Municipios y Provincias españolas? ¿Se imaginan que en Alemania hubiera un partido que acusara a otro de querer romper el consenso de todos los partidos alemanes por presentar una declaración en defensa de la Constitución alemana, o en EEUU, o en Francia? ¿Estamos locos? ¿A que grado de estupidez estamos llegando en España? Aquí los que rompen el consenso son Esquerra Republicana, Convergencia y Unió e Iniciativa Per Cataluña, que no querían aprobar una declaración contra el Plan Ibarretxe y menos en defensa de la Constitución en unos órganos e instituciones españolas. La dirección ejecutiva del PSOE hoy es un mono con dos pistolas, vamos un peligro. No lo tienen claro. Están perdidos. El problema es que los que tienen un plan para robarte la cartera y tienen claro que quieren robarte la cartera, te roban la cartera mientras tú tratas de averiguar por qué te has perdido. Desde aquí pido una nueva dirección en el PSOE. Zapatero es un mediocre y los que le rodean y asesoran más.
