JUSTICIA
Arrancan los juicios rápidos con problemas informáticos y críticas de jueces y fiscales
Por Raúl Romero Martín
2 min
España28-04-2003
El primer día de aplicación del nuevo sistema de juicios rápidos, que permitirá reducir un 94 por ciento los plazos para emitir sentencia en delitos con penas inferiores a cinco años, se saldó con múltiples problemas informáticos en Madrid y con críticas de colectivos de jueces y fiscales respecto a la falta de medios para aplicar la reforma.
Un hurto frustrado en un centro comercial, una sentencia in voce por unos pendientes, una bofetada a un agente por pedirle el carné y un empleado acusado de robar a su jefe son algunos de los casos que podrán resolverse, desde el pasado lunes, con la entrada en vigor de los juicios rápidos, a pesar de que esta modalidad de justicia inmediata haya arrancado con algunos errores informáticos y haya suscitado cierta polémica en el colectivo de la abogacía. Los mayores problemas del primer día de los juicios rápidos se sufrieron en Madrid. El decano de los jueces de la capital, José Luis González Armengol, aseguró que no se estaban celebrado allí juicios rápidos al fallar la agenda de señalamientos. Además, la junta de jueces de Getafe se dirigió al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid para indicar que no se podía aplicar la ley por falta de medios. En Barcelona, el fiscal Jefe, José María Mena, indicó que se había producido un "relativo desconcierto". A media tarde, la agenda informática de Cataluña registraba 23 apuntes más de un 60 por ciento de los juicios inmediatos se habían suspendido por problemas de citación, pero un 40 por ciento de los delitos tramitados por esta vía rápida ya tienen condena. A pesar de los primeros inconvenientes, el ministro de Justicia, José Mª Michavila, destacó el arranque de "un nuevo y potente motor de la Justicia", que se podrá aplicar entre un 30 por ciento y un 60 por ciento de los delitos que se cometen y a través de cual van a estar interconectados 2.100 puestos de la Guardia Civil y 280 comisarías y puestos fronterizos con 1.356 juzgados, 70 fiscalías y 82 colegios de abogados de toda España. Michavila y el ministro del Interior, Ángel Acebes, admitieron la necesidad del rodaje del nuevo sistema y, tras conocer que se habían producido caídas del sistema en tres juzgados y que la agenda electrónica no funcionó hasta media mañana, prefirieron subrayar "el buen funcionamiento del sistema en su conjunto." Para Mariano Fernández Bermejo, el funcionamiento no es tan bueno como para Michavila y Acebes. El fiscal jefe de Madrid, muy duro con la nueva modalidad de juicios rápidos, criticó la falta de presupuestos y los fallos informáticos. Para Michavila "el fiscal jefe de Madrid se ha manifestado en rebeldía y hará todo lo posible para que falle todo."