ANÁLISIS DE LA SEMANA
Malos tragos
Por Almudena Hernández
2 min
Sociedad30-03-2003
Por la boca muere el pez. El hombre puede morir de egoísmo. Mientras la guerra de Irak parece llenarlo todo, otras bombas caen en la sociedad occidental en forma de problemas silenciados o casi callados. Hace un tiempo la población española y europea se alertaba porque habían aparecido unos pocos casos de ganado infectado con la encefalopatía espongiforme bovina, el mal de las vacas locas. En España, en lo que va de año se han detectado 39 casos de animales enfermos. ¿Ha habido repercusión en los medios de comunicación? ¿Y en los consumidores? Mientras tanto, los ganaderos se quejan porque el Ministerio de Agricultura destina menos ayudas a los afectados por el sacrificio de los animales sospechosos. Hace años que se localizaron los primeros casos de la encefalopatía espongiforme bovina en Europa, pero en el caso de España, según los expertos, todavía no ha llegado el peor momento. En el consumo la ética debe y tiene que ser el producto estrella. En todos los ámbitos, en todos los sectores. El mal de las vacas locas comenzó porque se alimentaba a los animales con piensos tan económicos como inseguros para la salud. Tampoco parece ser la ética el producto estrella en los nuevos mercados, como ocurre en muchas páginas de Internet. La organización no gubernamental Anesvad ha hecho un estudio para detectar la demanda de pornografía infantil que hay en la red. Los resultados dejan a numerosos usuarios españoles en evidencia. La ética, además, debe acampar en todos los órdenes de la vida. Con permiso del maestro Gabriel García Márquez, no sólo debe acompañar al Periodismo -"como el zumbido al moscardón"-: primero la vida. La vida de los niños, juguetes en muchas ocasiones; y la vida de los mayores, juzgados injustamente sin respeto a ninguno de los derechos humanos. La ética y la responsabilidad. Cada cual debe responder de sus actos en su entorno. El periodista, el padre, el juez, el médico... La Humanidad tiene enfermedades más difíciles de curar que una neumonía atípica, las de la falta de valores, las que afectan al alma y que, posiblemente, no estén originadas por ingerir un trozo de carne en mal estado.
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo