ANÁLISIS DE LA SEMANA
El verdadero significado
Por Almudena Hernández
2 min
Sociedad07-07-2002
Hay palabras que nunca se quieren escuchar. Existen palabras que da miedo pronunciar y es duro entender su significado aplicado a una realidad cercana. Da miedo la palabra "guerra", la palabra "muerte", la palabra "fin". El sida va a matar a 68 millones de personas en 20 años. Quizás uno de esos nuevos casos que acabarán con la vida de millones de personas en apenas lo equivalente a una juventud esté muy cerca. Al enfermo -también persona- le resulta angustioso esperar la llegada de una posible vacuna, mientras se repite a sí mismo miles de veces lo que significa la palabra "guerra", la palabra "muerte", la palabra "fin". Tienen significados distintos según quien las pronuncie. Otra enfermedad está causando bajas en la población de todo el mundo, cada vez de forma más alarmante. Infunde respeto, y mucho temor, la palabra "cáncer". Duelen. Todas esas palabras duelen porque en muchos casos concretos -de personas- están provocando sufrimiento a quien lo padece y a quienes están alrededor. Otros males tiene la sociedad contemporánea que físicamente no se ven, pero también duelen. En Europa hay estrés laboral. La gente está enfermando mentalmente, y da miedo la palabra "locura". Cuando una persona se prepara para ser feliz y llega el imprevisto -una enfermedad mortal, un accidente de avión...-, con la posibilidad de la infelicidad tienen que aumentar las de cambiar el significado a las palabras. Cuanto antes termine la guerra más pronto llegará la paz. La muerte es lo desconocido, que antes o después habrá que conocer: el reencuentro, la esperanza, la verdadera vida... El fin de esta cosa puede llevar al principio de aquella otra. No tener posibilidades para la vida, puede significar en algunas ocasiones es morir, en otras ser matado. La cercanía de la muerte, cuando casi se conoce la fecha, hay que afrontarla con dignidad, un valor que dota del verdadero significado a las palabras y a la persona.
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo