FÚTBOL SALA
España, la pesadilla de Brasil
Por David del Olmo
2 min
Deportes31-03-2002
Doce hombres: Jesús, Amado, Kike, Julio, Orol, Cobeta, Joan, Javi Rodríguez, Daniel, Andreu, Javi Sánchez y Paulo Roberto. Ellos son los integrantes del mejor equipo de fútbol sala del mundo. Junto con su entrenador, Javier Lozano, han ganado el Campeonato del Mundo, el Campeonato de Europa, el Torneo de Singapur, y la primera edición del Torneo del Centenario del Real Madrid, disputada en Torrejón de Ardoz.
Ambos finalistas se habían deshecho de sus rivales en las semifinales: los españoles con facilidad, los brasileños con más sufrimiento. España venció por 16-0 a Japón, un país sin tradición balompédica invitado por ser el organizador del próximo Mundial de fútbol. Los goles de un partido-fiesta para los espectadores del pabellón madrileño del Parque Corredor de Torrejón de Ardoz los consiguieron Paulo Roberto, que marcó cuatro; Kike, Javi Rodríguez, Cobeta, Javi Sánchez, Joan -todos ellos por partida doble-, Andreu y Orol. Brasil ganó a Egipto, con algunos apuros, por 4-2, con tantos de Manoel Tobías (2), Rogerio y Cico para los brasileños y de Fathy (2) para los egipcios, revelación del último Mundial. Frente a España se vio el mejor partido del campeonato. Los brasileños contaron, por primera vez, con un jugador que no milita en un equipo de su país -Schumacher, jugador del Antena 3 Boomerang de la Liga española-. España se adelantó por medio del hispano-brasileño Daniel a los cinco minutos, pero Falcao empató antes del descanso. En la segunda parte Cobeta volvió a adelantar a España, pero Euler devolvió el empate. En la recta final, Pablo dio la vuelta al marcador para los brasileños. España dominaba el juego y acosaba la portería de un rival poco acostumbrado a defenderse, pero parecía que se le podía escapar la victoria. Lo pareció hasta que la genialidad española salió a relucir en una jugada de estrategia que significó el empate de Kike. Faltaban dos minutos para el final. En la prórroga había gol de oro, pero Javier Lozano no se arrugó. Mantuvo el cuarteto más ofensivo y un gol de Joan les dio la victoria con un doble penalti; el catalán enmendó de la mejor manera el error que permitió el segundo gol de los brasileños.