PUNTOS DE DEBATE
El poder de Internet
Por Elías Said
2 min
Opinión21-06-2009
Desde que el pasado 13 de junio el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, saliera reelecto, su opositor Mir Husein Musavi y sus seguidores han venido utilizando las redes sociales virtuales para tratar de saltar el cerco mediático instaurado por dicho presidente, ante la declaratoria de fraude que éstos intentan hacer valer para impulsar un cambio político en ese país. Más que indagar en el trasfondo político y en los intereses de cada bando en dicho conflicto, creo importante hacer uso de dicha situación, como un claro ejemplo de cómo las redes sociales virtuales e Internet cuentan con oportunidades potenciales para la creación de movimientos sociales, carentes del respaldo de los sectores tradicionales de medios de comunicación locales. Estos nuevos espacios virtuales, no sólo cobijan pretextos y actividades de ocio que entendemos propias de ellos, sino que también traen consigo el desarrollo de actividades, que buscan trascender e impactar en los escenarios locales, nacionales, regionales e internacionales, empleando estos espacios virtuales para el desarrollo de acciones de colaboración y asociación. Personas anónimas y personajes públicos se unen para hacer una causa común, lo más fuerte posible, de cara a inclinar la balanza en un entorno desigual de David y Goliat, que podemos apreciar entre quienes detentan el poder y quienes aspiran a éste o luchan contra éste. Desde finales del pasado año, vemos abundantes ejemplos en nuestro entorno de lo hasta ahora expuesto: un Barak Obama que comenzó siendo virtual y que paulatinamente fue sumando liderazgo hasta convertirse en presidente, ciudadanos ávidos de noticias relacionadas con los resultados electorales en Venezuela en un contexto mediático silenciado por Ley, y una búsqueda de la paz en Colombia a través de la marcha del millón de personas contra las FARC, son un claro ejemplo de las capacidades que puede traer consigo Internet, al ampliar los canales de acción democráticos y de acercamiento ciudadano, trascendiendo la capacidad individual y pasando a convertirse en actores globales. En el marco de este contexto, no sólo se abren nuevas oportunidades para quienes laboran en los medios de comunicación y para los ciudadanos, al romper las barreras de silencio generadas por quienes detentan el poder, sino que, además, abre una nueva dimensión de temores para quienes aún conservan el modelo de dominación tradicional, y ven a Internet como el enemigo latente contra el deseo de adoctrinar a sus iguales, en el marco de determinadas ideas preconcebidas. El poder de Internet, con lo que está sucediendo en Irán o lo que sucedió en Estados Unidos, Venezuela y Colombia, entre otros ejemplos, son sólo la punta del iceberg de un nuevo escenario que en la medida en que los ciudadanos tomen conciencia, sirva para no sólo para generar cambios, sino también para espacios de reflexión en torno a quienes nos lideran o dicen liderarnos, por más que esto les incomode.
