CATALUÑA
Maragall tira la toalla y deja vía libre a Montilla
Por Teresa García
2 min
España24-06-2006
El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, ha hecho pública su renuncia a ser candidato del PSC a la reelección por considerar "cumplidos" sus objetivos y con la intención de dar paso a "una nueva generación" que gestione el desarrollo del Estatuto. Sin embargo, la renuncia del presidente de la Generalitat como candidato constata para el PP la "debilidad dentro de su partido".
En su discurso, eludió citar por su nombre a su sustituto, pese a que todos los comentarios apuntaban al actual ministro de Industria, José Montilla, y tampoco reveló la fecha concreta en la que se convocarán las elecciones anticipadas en Cataluña. "He tomado la decisión de no volver a presentarme. He hecho lo que tenía que hacer. He cumplido mis objetivos", dijo Maragall justificando su labor como máximo dirigente del Gobierno autonómico. Era su forma de decir que se iba, pero que lo que hacía porque él quería, que no se lo imponía y que, además, lo hacía con los objetivos cumplidos, frente a los que le achacan casi tres años de “no Gobierno”, un desastre en la fórmula del Tripartito y un Estatuto que no ha votado más de la mitad del electorado catalán. Maragall ha decidido precipitar el anuncio para evitar que pudiera interpretarse que estaba relacionado con la entrevista que al día siguiente mantuvo en la Moncloa con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para tratar del desarrollo de la reforma estatutaria y que esta fuera interpretada como fruto de la presión del secretario general del PSOE. Maragall, que informó a la dirección del PSC, pero no a la del PSOE, justificó su silencio a lo largo de estos meses en la necesidad de centrar toda la atención en la aprobación del Estatuto. Así, la decisión pone punto final a varios meses de especulaciones sobre el futuro de Maragall después de que trascendiera que la dirección del PSC pretendía relevarle como candidato en beneficio de Montilla, a quien no nombró por su nombre, si bien le presentó diciendo que se trata de una persona que ha hecho mucho por el Estatuto y por las políticas sociales y de izquierda. Por su parte, mientras que el ministro de Industria, José Montilla, probable sucesor de Maragall, ha expresado su "respeto" por la decisión tomada por el president y ha destacado su "papel fundamental en Cataluña y en el PSC". Josep Piqué, ha afirmado que la renuncia de Maragall es una de las consecuencias que pactaron Zapatero y el líder de CiU, Artur Mas, cuando acordaron el texto fundamental del Estatuto en Moncloa. Mientras, el presidente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, considera que la decisión de Maragall dibuja "un escenario magnífico" para ERC porque la retirada de Maragall supone que a partir de ahora su partido recupere su perfil propio para convertirse en el único referente del nacionalismo de izquierdas en Cataluñaa. El presidente catalán ha mantenido durante este tiempo un enigmático silencio, salpicado de intervenciones en el Parlamento de Cataluña o en otros actos públicos en los que daba a entender que estaba dispuesto a presentarse a otro mandato. De hecho, la dirección del PSC se mantenía a la expectativa de la decisión que pudiera adoptar, a sabiendas de que tenía muy poco margen de maniobra si decidía presentarse a la reelección.