SIN ESPINAS
Amor, la palabra más bella
Por Javier de la Rosa
2 min
Opinión23-04-2006
“Amor” ha sido elegida la palabra más bella del castellano en una encuesta organizada por la Escuela de Escritores con motivo del Día del Libro. Más de 47.000 personas de todo el mundo han participado durante casi un mes con sus votaciones en la página web del concurso. “Amor”, ese vocablo tan presente como necesario en nuestras vidas y tan difícil de expresar sólo con el lenguaje humano. Es tan complicado de definir como de atrapar completamente ¿Es un sentimiento intenso? ¿Es una experiencia profunda, personal y plena? ¡Demuéstrame un Amor si puedes! Saca tu microscopio, tu bisturí, todos tus aparatos de medición y tus tubos de ensayo y dime cuánto pesa, cuánto mide… Y sin embargo, no hay mayor certeza en nuestra vida que la presencia y la existencia del Amor; que se manifiesta de tantas formas y maneras tan diversas… Yo creo que el Amor es una experiencia plena del ser humano que, consciente de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser. Por el cual desarrolla un afecto, una inclinación y una entrega total y eterna. Un encuentro y una unión que le completa, le alegra y le da fuerzas para vivir en una actitud de donación constante y creativa. Esta es la mía que sé que es una más y que es pobre porque no refleja lo que en realidad es el Amor. Todo el mundo puede y habla del Amor porque aunque es tan difícil de definir es sencillo de entender para todos los seres humanos. Desde el niño pequeño que sabe que el amor tiene un rostro y unos brazos, los de su madre y de su padre, hasta el joven que tiene un gran amigo, el adulto que goza de la compañía de su pareja o el anciano sabio que en su primera encíclica como Papa escribe: “Deus caritas est” (Dios es Amor). Es bello que la palabra “Amor” haya sido elegida la palabra más bella del castellano. Porque el Amor contiene tres cualidades necesarias e inseparables entre sí: la belleza, la bondad y la verdad. Por eso la belleza del Amor es buena y verdadera, por eso la bondad del Amor es verdadera y bella y por eso sólo la Verdad propuesta con Amor es buena y bella. Ese Amor universal está vivo, tiene un rostro, nació en un pueblo llamado Belén, que significa “la casa del pan”, murió por ti y por mí en Jerusalén, “la ciudad de la paz”, y resucitó para mostrarte que el Amor es más fuerte que todo el odio, la injusticia, el miedo y la muerte. Y para anunciarte que quien come de ese pan hecho en Belén vive de verdad hoy y por siempre.
