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IRÁN

El Consejo de Seguridad pide a Irán que abandone su programa nuclear

Por Miguel MartorellTiempo de lectura1 min
Internacional02-04-2006

Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU llegaron la pasada semana a un acuerdo sobre el controvertido programa nuclear iraní. Después de tres semanas de negociaciones se aprobó una declaración presidencial no vinculante en la que se pide a Irán el abandono del programa de enriquecimiento de uranio. El Régimen Ayatolá ya ha vuelto a insistir en que no suspenderá sus actividades.

Todo sucedió según lo previsto. Las diferencias entre los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, China y Rusia) han impedido que se tomen medidas más contundentes contra Irán. Mientras que Washington y la Unión Europea eran partidarias de aplicar sanciones al programa nuclear de Teherán, Moscú y Pekín optaban por una vía más suave. Finalmente, después de tres semanas de negociaciones, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó, por unanimidad, una declaración presidencial no vinculante en la que se insta a Irán a abandonar, en un plazo de 30 días, su programa de enriquecimiento de uranio y a cumplir las exigencias del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA). Además, se pide al director del OIEA, Mohamed El Baradei, que en el plazo de un mes redacte un informe sobre el cumplimiento por parte de Teherán de dicha suspensión. Sin embargo, el embajador iraní ante el OIEA ya ha anunciado la posición de su Gobierno: "definitivamente, no suspenderemos de nuevo nuestro programa de enriquecimiento". A pesar de la escasa efectividad de la medida, el embajador estadounidense ante la ONU, John Bolton, expresó su satisfacción por la declaración, que supone, según dijo, "un claro mensaje a Teherán". Su homólogo ruso, Andrey Denisov, se mostró más cauto y afirmó que "el lenguaje de la declaración podría mejorarse, pero en esta fase es el apropiado", pues muestra, "el grado de preocupación del Consejo". En este largo proceso negociador, Rusia y China han sido los mayores opositores a que el Consejo tome medidas coercitivas o aplique sanciones a Irán por su controvertido programa nuclear. De hecho, la declaración presidencial se aprobó por unanimidad tras hacer algunas concesiones a Moscú y Pekín.

Fotografía de Miguel Martorell