La Comisión Europea ha denunciado a Google tras que la compañía estuviera, supuestamente, obligando a los fabricantes de móviles basados en Android a incluir aplicaciones desarrolladas por Google. Esta imposición estaría bloqueando cualquier intento por otras compañías de competir en el mercado, lo que no está permitido en la legislación europea.
La venta de productos pirateados alcanza el 2,5% del comercio mundial total (5% en Europa). Los principales productores se siguen encontrando en países emergentes, aunque los nuevos productos se alejan de las marcas de lujo y afectan a productos de necesidad que, incluso, pueden dañar seriamente la salud.