El mes de abril finalizó con un déficit que se sitúa en 5.661 millones de euros, un 18 por ciento menos que durante el mismo periodo del 2009. Esta mejora se debe entre otros factores al aumento de los ingresos del Estado. Por su parte la Seguridad Social obtuvo un superávit de 7.213 millones de euros.
La OCDE augura buenos resultados para España a medio y largo plazo, aunque a corto plazo ocupa una de las últimas posiciones en cuanto a los países europeos se refiere. Se prevé un retroceso del PIB de 0, 2 por ciento y se pronostica que en el 2011 la tasa de paro disminuya al 18, 2 por ciento. La OCDE apoya las decisiones presentadas por el gobierno y las considera necesarias, aunque consideran necesarias reformas de las pensiones y del mercado laboral.