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SANIDAD

Tres crisis sanitarias en España en un mes

Por Covadonga de la CuestaTiempo de lectura1 min
Sociedad02-09-2001

La crisis sanitaria persiste en suelo español. La alarma que originó el mal de las vacas locas, la fiebre aftosa y la peste porcina va cayendo en el olvido, eclipsada por nuevos problemas. El fármaco Lipobay, los nuevos brotes de legionella en varias provincias y las recientes muertes ligadas a la hemodiálisis denotan las dificultades que atraviesa la Sanidad española.

Los últimos focos detectados durante el mes de agosto en Andalucía, Murcia, Alicante y Pamplona sembraron el pánico en la población. Se cuestionó el correcto estado de los sistemas de refrigeración hospitalarios, posible causa de los contagios. La enfermedad del legionario pasó a segundo plano tras los fallecimientos que ocasionó el empleo de un fármaco que combatía el colesterol: Lipobay. La combinación de una de las sustancias de este medicamento, la cerivastatina, con un remedio contra los triglicéridos, resultó mortífera. La última de estas crisis se ha saldado, como en el caso del Lipobay, con la retirada del agente sospechoso. Doce muertes tras recibir hemodiálisis eran hasta el domingo pasado el trágico balance de una nueva controversia. Los dializadores Althane A-18, fabricados por la empresa sueca Baxter Althine Medical, han sido reemplazados. La cuestión se centra ahora en por qué no se retiraron antes si desde el día 20 recaían sospechas sobre ellos tras morir cuatro pacientes en apenas tres días en el hospital de La Princesa de Madrid. Dializadores del mismo lote se emplearon días después en la clínica de la capital del Turia. Fuentes de la Consejería de Sanidad han determinado que "la investigación continúa abierta". El Instituto de Salud Carlos III se encargará de analizar todos los productos sanitarios y no sanitarios usados. La complejidad del caso demorará el conocimiento de los resultados hasta dentro de "al menos una semana". Las continuas crisis sanitarias hacen replantearse el actual modelo de Sanidad y son ya varios los que demandan intensificar la política preventiva, además de la paliativa.