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Tráfico hace el mejor balance de accidentes de 25 años

Por Berta BaronaTiempo de lectura2 min
Sociedad01-09-2004

España ha vivido el verano más tranquilo en las carreteras desde hace 25 años. Los conductores han estado más concienciados al tiempo que se han incrementado los controles de velocidad y alcoholemia y se han mejorado las medidas de tráfico.

Durante los meses de julio y agosto han perdido la vida 708 personas en 602 accidentes mortales, un 16,8 por ciento menos con respecto al verano anterior. También ha habido un 25 por ciento menos de heridos graves, en total 360, y 460 leves. Estos datos son los mejores registrados en el periodo estival de los últimos 25 años. Se debe a la campaña de sensibilización y de aumento de los controles de alcoholemia y de velocidad de la Dirección General de Tráfico (DGT). Estas medidas han sido más intensas en agosto por la mayor cantidad de desplazamientos. Los controles de velocidad se han llevado a cabo sobre un 10 por ciento de los vehículos, alrededor de 2,5 millones, desde 1.700 puestos de vigilancia. En años anteriores, los vehículos controlados no llegaban al millón y medio. En cuanto a las medidas para regular el tráfico, se han puesto en funcionamiento 500 kilómetros de carriles adicionales en las entradas y salidas de las ciudades y se ha limitado la circulación de determinados vehículos, como camiones de más de 7.500 de masa máxima autorizada. También han contribuido en la reducción de la siniestralidad los mensajes en los paneles destinados a concienciar a los conductores: "50 muertos en la operación salida de agosto de 2003", "la velocidad puede matar" y "lo importante es volver", así como los anuncios en los medios de comunicación. Del mismo modo lo han hecho los controles de alcoholemia. En todo este dispositivo han intervenido todos los efectivos de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, técnicos especializados en los centros de Gestión del Tráfico y 400 funcionarios. Las estadísticas demuestran que los conductores están más concienciados a la hora de ponerse frente al volante. Al endurecimiento de los controles y la sensibilización hay que añadir el efecto en las conciencias del hecho de que en otros países de la Unión Europea haya descendido el número de muertos en accidentes para explicar las razones de la nueva situación.