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FÚTBOL

Brasil, campeón en los penaltis

Por Javier SánchezTiempo de lectura4 min
Deportes25-07-2004

Los dos equipos más poderosos de Suramérica se disputaron la final de la Copa América, que ganó Brasil en la tanda de penaltis. Uruguay derrotó al defensor del título, Colombia, en el partido por el tercer y cuarto puesto.

Semifinales Las series las abrieron colombianos y argentinos. Los cafeteros, que llegaban como únicos invictos, acusaron lo fácil de sus primeros partidos y se mostraron como un equipo sólido en defensa, pero muy poco creativo en ataque. Las estadísticas no engañan, y en la Copa América los albicelestes sólo habían perdido dos veces contra Colombia. Marcelo Bielsa vio cómo se lesionaba el capitán, el zaguero del Valencia Roberto Fabián Ayala, aunque en cambio, recuperaba a Javier Mascherano, que había cumplido un partido de sanción. Además, la albiceleste contaba con el joven goleador Carlos Tévez, en racha, que anotó el gol contrá Perú en la anterior partido. El joven especialista en los lanzamientos de falta entraba en la alineación en detrimento de Jorge D¬Alessandro, que se encontraba lesionado. Desde el inicio, el conjunto de Marcelo Bielsa fue un huracán. Salió a por el combinado de Reynaldo Rueda y no le dio posibilidad ninguna de plantarle cara. Tévez, González y el lateral ex- del Barcelona Juan Pablo Sorín anotaron los tres goles de su equipo y convierten a su equipo en el primer finalista de Perú 2004. El estadio Nacional de Lima enmudeció con el gran juego mostrado por el equipo de Marcelo Bielsa y aguardaba a ver al segundo finalista que saldría del partido Uruguay contra Brasil. Se especulaba con un maracanazo, pero aun sin jugar con su once habitual, pocos equipos pueden hacer frente a la canarinha si juega con su clase. El seleccionador uruguayo, Jorge Fossatti, como todos los aficionados celestes, recordaban el partido disputado en la final de 1950, donde los uruguayos vencieron contra todo pronóstico. Así, el partido comenzó disputado y hubo con ocasiones en ambas áreas. Diego Forlán, Darío Silva, Kleberson, Álex... Fue Sosa quien anotó el primer gol a los veinte minutos del inicio tras un cabezazo. En el segundo tiempo, Brasil salió en tromba a empatar y Adriano lo consiguió en el primer minuto. A partir de ahí, el partido entró en decadencia: los dos técnicos querían guardar el resultado y se acabó llegando a los penaltis, donde los de Carlos Alberto Parreira anotaron sus cinco tantos desde los 11 metros. Con este marcador, Brasil será el emparejamiento de Argentina en la final en lo que es el gran clásico de la copa América. Final Brasil, actual campeona del mundo, extendió su reinado al lograr la Copa América en una intensa y emocionante final contra Argentina, que hizo todo el gasto y sólo claudicó en la ruleta de los penaltis al terminar el partido con empate (2-2). Los 45.000 espectadores que abarrotaban el estadio Nacional de Lima vibraron en el duelo de los dos titanes de América, que ofrecieron el espectáculo que se les supone. Un despiste defensivo aprovechado por Luisão justo antes del descanso y un balón suelto que no desperdició Adriano para clavarlo con la zurda, echaron por tierra el buen trabajo de Argentina, que no supo conservar su ventaja. Una astuta y veloz internada de Luis González, trabada en claro penalti y convertido con su habitual seguridad por el Kily González premió la mayor ambición de los argentinos en los primeros minutos. Sin embargo, una falta al borde del área a Gustavo Nery fue aprovechada con maestría por Brasil al borde del descanso. Alex templó suave al área y allí surgió Luisão para enmendar su error y cabecear ajustado al palo, ante la pasividad de la defensa. La gran intensidad del primer tiempo se atenuó en la reanudación: Argentina seguía con el balón en los pies y Brasil esperaba para contragolpear con Luis Fabiano y Adriano. Pero sin balón, los brasileños se sienten incómodos; más aún con la entrada del Chelo Delgado, que se hizo dueño de la banda derecha y surtió de balones al centro del área. En uno de ellos, el propio jugador del Cruz Azul mexicano se hizo con el rechace y rompió la pelota para marcar el segundo a tres minutos del final. Pero Adriano -a la postre máximo artillero del torneo, con siete tantos-, soltó un imponente zurdazo en el tiempo añadido para restaurar el empate y dejar la suerte del partido, ya que no hay prórroga, a la ruleta de los penaltis. Allí, Andrés D¬Alessandro y Gabriel Heinze fallaron las dos primeras penas máximas y dejaron el camino expedito a Brasil, que no falló con Adriano, Edú, Diego y Juan.