REINO UNIDO
Blair cumple diez años al frente del Partido Laborista
Por Eva Pozueco Turabián 1 min
Internacional25-07-2004
Los británicos no olvidan que su país fue el principal aliado de EE.UU. en el ataque a Iraq. Las armas de destrucción masiva iraquíes no aparecen y la confianza del pueblo en el partido Laborista se debilita.
Tony Blair, primer ministro británico, celebra sus diez años al frente del partido en un clima de decadencia, de desconfianza, de baja credibilidad. La publicación del 'Informe Butler' ha dejado al descubierto la actuación de los servicios británicos antes de la invasión de Iraq. Antes del ataque, el Gobierno sospechaba que Sadam no poseía armas de destrucción masiva pero siguió adelante. Tony Blair está exculpado de cualquier vinculación con este informe pero el pueblo tiene sus dudas. El descontento se incrementa con el anuncio por parte del Gobierno de próximos recortes en el Ejército. La reducción de los soldados la puso sobre la mesa el ministro de Defensa británico, Geoff Hoon, ante la Cámara de los Comunes. El plan contempla prescindir de miles de soldados, reducir los empleos civiles y eliminar cuatro batallones de infantería de forma prograsiva, desde el presente año hasta finales de 2008. Hoon, sostiene que los recortes servirán para crear un Ejército más moderno que se enfrente a los problemas reales de la época: el terrorismo internacional.