CHILE
Augusto Pinochet, de líder a demente
Por Txema García2 min
Internacional15-07-2001
La figura de Augusto Pinochet Duarte es sin duda la más controvertida del país andino. El ex dictador es un auténtico héroe para la derecha del país y para los sectores más conservadores, ya que le ven como el salvador de Chile frente al Comunismo. La izquierda del país y los sectores más progresistas ven en el militar el causante de la más sangrienta represión acaecida en el país sudamericano en el siglo XX.
El otro rasgo de identidad de Pinochet lo marca toda una vida dedicada al mundo castrense. Comenzó en 1933 en la Escuela Militar de Chile y salió tres años más tarde como alférez, aunque pronto ascendió a teniente. Se dedicó a la docencia como profesor de Geografía Militar de dicho centro y en 1956 se le destinó a Washington como agregado militar, después de lo cual fue enviado a Quito para organizar la Academia de Guerra de Ecuador y en 1970 ascendió a general de división. La inestable situación política que vive el país lleva a Pinochet en 1972 a la Comandancia en jefe interina del Ejército chileno. En 1973, fue confirmado en el cargo. El presidente chileno democráticamente elegido, Salvador Allende, declara zona militar Santiago de Chile en respuesta a las huelgas y disturbios, y Pinochet anuncia la respuesta del Ejército en el caso de la persistencia de los disturbios. Finalmente, el 11 de septiembre de 1973, Pinochet y otros mandos militares perpetran el golpe de Estado en el que fue asesinado Allende "para liberar al país del yugo marxista", a raíz de lo cual comenzó la represión contra la izquierda del país. Pinochet asume el cargo de Jefe Supremo de la Nación el 27 de junio de 1974 y el 17 de diciembre es nombrado presidente. La oposición a su estilo de gobierno siempre estuvo latente y Pinochet consiguió sobrevivir a varios atentados. El plebiscito popular acerca de su gestión marcó el inicio del fin de Pinochet en el poder. En el mismo un 55,2 por ciento de votos se decantaron a favor del No frente al 42 por ciento del Sí, tras lo cual, Pinochet anunció que dejaría el poder en 1990, aunque permanecería como comandante en jefe del Ejército. Las primeras elecciones presidenciales tras 26 años de dictadura pusieron el 14 de diciembre de 1989 al democristiano Patricio Aylwin al frente del Gobierno. Sin embargo, Augusto Pinochet se aseguró salir del mando del país con plenas garantías de impunidad ante sus excesos. Legisló a su favor y se aseguró el nombramiento como senador vitalicio. Desde que dejó la Presidencia, Pinochet sorteó diversas acusaciones de torturas, asesinatos y represión. Según las organizadoras defensoras de los Derechos Humanos, los servicios de seguridad hicieron desaparecer durante el régimen pinochetista a unos 3.000 prisioneros políticos, decenas de miles de disidentes conocieron la tortura y la cárcel, y más de 30.000 chilenos tuvieron que exiliarse.