TENIS

Hewitt pide paso

Por Roberto J. Madrigal2 min

Deportes24-06-2001

Lleyton Hewitt ha mostrado credenciales de sobra para optar al título en Wimbledon. Después de ganar hace una semana en QueenŽs, el australiano ha confirmado su buen momento de forma con la victoria en Hertogenbosch (Holanda).

Hewitt defendió su condición de primer cabeza de serie con éxito y una tremenda superioridad. De este modo, el joven australiano afrontará el tercer Grand Slam de la temporada desde el quinto puesto de la Carrera de Campeones. Si hace una semana Hewitt se adjudicó el título en QueenŽs, esta vez el australiano ha aumentado su palmarés con el título de Hertogenbosch, con facilidad, en dos mangas: 6-3 y 6-4. Una superioridad que mostró desde el primer día, ya que Hewitt no cedió un solo set en todo el torneo: así, en semifinales derrotó al suizo Roger Federer, cuarto cabeza de serie, por un contundente 6-2 y 6-4. Guillermo Cañas, en cambio, necesitó una victoria más trabajada para deshacerse en semifinales de Tommy Robredo. El español desempeñó un buen papel en el torneo holandés, aunque a pesar de su brega, cedió al empuje del argentino por 7-5 y 6-4. Otro que se crece en la hierba es el sueco Thomas Johansson, que también consiguió su segunda victoria consecutiva. La última fue en Nottingham, en la que derrotó al israelí Harel Levy por 7-5 y 6-3, después de apear en el camino, entre otros, al inglés Greg Rusedski. En Eastbourne (Inglaterra), Lindsay Davenport impidió que la canaria Magüi Serna armase el taco en vísperas de Wimbledon. La española cuajó una excelente actuación, aunque la calidad y la fuerza de Davenport, número tres de la clasificación WTA, fueron demasiado para Serna, con lo que el marcador reflejó un abultado 6-2 y 6-0. En Den Bosch, además de Hewitt jugaba su novia, Kim Clijsters, también como primera cabeza de serie. La finalista de Roland Garros, repitió la semifinal belga del torneo francés contra Justine Henin, segunda preclasificada, aunque esta vez con un signo bien distinto: ambas ofrecieron un partido competido, de poder a poder, pero Henin se sacó la espina de los Internacionales de París y venció por 6-4, 3-6 y 6-3, con lo que aguó la fiesta que se prometían Hewitt y Clijsters para celebrar el doblete.